El otoño caliente de ‘Com si fos ahir’: dos tramas calientan la serie de TV3

La serie diaria de las tardes de TV3, Com si fos ahir, ha empezado la octava temporada con récords de audiencia y podría superarse sí misma si la tendencia se mantiene. Este viernes, la ficción de producción propia de la cadena pública catalana tuvo un pico del 23,5% de cuota de pantalla, pero todavía podría ir a más porque hay varias tramas que están enganchando a los espectadores. Por un lado, está el drama in crescendo en casa de Gemma (interpretada por la actriz Àurea Márquez) y Toni (David Vert), una pareja que ya venía de un verano en crisis por el aburrimiento y ahora está en grave peligro de ruptura desde que ella ha descubierto que él la abandonó en medio del incendio en un hotel al cual habían ido a pasar un fin de semana romántico, precisamente para intentar remontar la relación. Pero esta trama tiene una dura competencia con dos historias más… bastante más divertidas.

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Dos mujeres maduras y dos hombres misteriosos

Dos de las tramas que se abren paso con fuerza en Com si fos ahir han tenido un momento álgido precisamente en el capítulo de este viernes. Hacía días que se cocían, pero ayer tuvieron un primer estallido. Por un lado, Eva (Alícia González Láa) se lanzó, literalmente, a los brazos de Rodri (Ivan Benet), el misterioso médico amigo de Andreu (Marc Cartes) que ha aparecido de la nada de repente y que esconde algún secreto. Después del desastre de relación de la temporada pasada con Lluc (Jordi Llovet), Eva debería ir con pies de plomo, pero su carácter impulsivo no se lo permite. Por lo tanto, está garantizada la diversión con esta pareja que, de momento, no ha podido pasar de tres besos apresurados en la penumbra del gimnasio una vez acabada la jornada, cuando Eva estaba sola cerrando y él se presentó a buscar el móvil que se había dejado y salió besuqueado. La escena no pudo continuar porque él, según aseguró, tenía «guardia». Pero no está claro que fuera cierto.

Estreno del actor Adrià Collado, la semana que viene

Paralelamente, está el gran escándalo: el asunto Pacman. Esta podría ser la temporada de Montse German, la actriz que interpreta a Sílvia, que se ha metido en una tórrida aventura telemática –hablando en plata: sexting– con un misterioso personaje llamado Pacman. La bomba ha llegado este viernes, momento en el que ha descubierto que su pretendiente anónimo es nada más y nada meno que su cuñado: el marido de la hermana de su actual pareja. Pongamos nombres: es Miqui (Adrià Collado), marido de Neus (Mercè Martínez), hermana de Francesc (Eduard Buch). Neus le enseña a Sílvia una foto de ella y su marido en una playa nudista y se desata el drama… divertido.

Sílvia queda horrorizada al ver la imagen porque reconoce el tatuaje en una ingle que había visto en una foto íntima que Pacman le había enviado. Y la semana que viene se tendrá que ver frente a frente con Miqui, que Neus le presentará porque, para acabar de rizar el rizo, Sílvia está ayudándolos a preparar una fiesta para celebrar los 25 años de casados. Así será la entrada del atractivo Adrià Collado en la serie, que no dejará indiferente a nadie, como ya pasó cuando tuvo un personaje a La Riera, hace años.