Comienza la semana y en Como si fuera ayer los dramas siguen marcando las tramas del grupo más famoso de TV3. Los amigos del instituto Reina Sibil·la y sus hijos están rodeados de enredos, mentiras y tensiones. En el capítulo de este lunes el dinero ha sido protagonista de algunas decisiones complicadas.
Cristina (Carlota Olcina) y Gemma (Àurea Márquez) ultiman su negocio. La Barnateca va tomando forma, pero los gastos cada vez son mayores. Por otro lado, la relación entre Litus (Pepo Blasco) e Ismael (Jaume Solà) es cada vez peor. El chico quiere dejar los estudios y está enfadado con su padre por la relación que ha comenzado con Àngela (Marina Gatell). Por eso, Litus tomará una decisión bastante cuestionable.
La remodelación del negocio de catering tiene un costo bastante alto
Las dos socias que protagonizan una de las tramas actuales más destacadas de Como si fuera ayer cada vez tienen más claro su negocio. La Barnateca va tomando forma y Cristina y Gemma deben asumir el gran costo que supone construir un negocio desde cero. Gemma, siempre tan correcta y cuadriculada, no quiere gastar más dinero del que ya han invertido. Por otro lado, Cristina no puede dejar de poner pegas a las cosas que han comprado. Por ejemplo, compraron un juego de tazas que eran carísimas y que ahora le parecen muy feas. Las dos mujeres se han de apretar el cinturón porque vienen meses complicados.
Itzíar (Mar Ulldemolins) ha detectado que los problemas con los números también le afectan a ella. La nueva chef del local ha detectado que el sueldo que han puesto en su contrato es más bajo de lo que habían acordado. Ella no está nada de acuerdo y le reprocha a Cristina que los cambios que han impuesto no son correctos. Ella se defiende diciendo que abrir un negocio es muy arriesgado y que la variación del sueldo se puede suplir con un fin de semana libre al mes.

Cristina intenta sobornarla diciendo que ha comprado las ollas de marca que ella les ha pedido, pero la chef frunce el ceño y se va del local. La actitud de ambas no es precisamente la más correcta. Itzíar ha conseguido un trabajo por los pelos cuando estaba casi con las patitas en la calle y, por otro lado, Cristina debería estar agradecida porque el negocio está en marcha gracias a Gemma y su nueva cocinera.
Las tensiones crecen entre las dos amigas
Gemma ha quedado con el grupo para hablar de su restaurante. La exempleada de la consultoría está muy emocionada con la Barnateca. Su local ofrecerá platos diversos, bebidas, y un espacio que pueda servir tanto para comer como para poder trabajar y echar un buen bocado. Incluso, después de las dudas sobre Itzíar, Gemma le cuenta a Sílvia (Montse Germán) que está muy contenta de tenerla en el negocio. Sílvia, en cambio, está bastante enfadada. Su amiga ha hablado con ella para quejarse de los cambios del contrato, pero la reacción de Gemma deja claro que no tenía ni idea.

La tensión entre ambas socias es cada vez mayor. ¿Podrá su alianza ser más fuerte que los caracteres tan diferentes que tienen? Cristina ha terminado comprando las tazas que quería, saltándose la conversación sobre ahorrar que había tenido con Gemma. Además, cuando ella le reprocha que haya hecho cambios en el contrato de Itzíar sin consultarlo, Cristina afirma que ha conseguido que firme a pesar de las reformas. Este tira y afloja que llevan entre ambas terminará mal si no dejan de pisarse una a la otra.
Ismael ha descubierto el secreto de Litus y el padre ‘soborna’ al hijo para que estudie
Después del capítulo bomba del pasado viernes, donde Litus y Àngela fueron descubiertos por Ismael dándose un beso en Sitges, la relación entre padre e hijo no mejora. El adolescente sigue con la idea de dejar los estudios y su padre está harto. Para intentar que abandone esa idea, le ha ofrecido pagarle un sueldo a cambio de estudiar. Evidentemente, la gestión es absurda. La obligación de su hijo es estudiar, solo faltaría que su padre le pague la nómina por aprobar el examen de biología.

Por otro lado, la pareja con menos química de la ficción parece que ha pasado página. Después de que Ismael descubriera la relación entre su padre y la madre de su novia, los dos adultos han llegado a la conclusión de que deben ahorrarse problemas y cortar lo que sea que tienen entre manos. En definitiva, un episodio que comienza el lunes con dilemas abiertos en algunas tramas. Las decisiones que toman los personajes a menudo tienen consecuencias y los guionistas de la serie que triunfa cada mediodía las irán destapando poco a poco.