El final de la semana ya está aquí para los protagonistas de Com si fos ahir. Una semana atípica marcada por los días festivos de Semana Santa que ha reducido las emisiones de la serie que lidera las tardes de TV3 hasta este jueves. Los guionistas han preparado una tanda de episodios marcados por la trama más candente de los últimos días, las investigaciones de Naiara (Daniela Brown) sobre el turbio negocio de drogas de Ferni. Antes de despedirse temporalmente de los fieles espectadores hasta el próximo martes, los protagonistas de la ficción tendrán que superar las emociones de un capítulo explosivo, con la despedida inesperada de uno de los personajes más queridos. Los espectadores pueden preparar las palomitas porque lo que sucederá no dejará a nadie indiferente.
Naiara debe pagar el precio de su traición
Las últimas semanas Naiara se ha convertido en la protagonista habitual de una trama marcada por la truculencia de un bar convertido en un nido de tráfico de estupefacientes. Sus ganas de ayudar a Jess (Polo Camino), víctima de una paliza casi mortal, la llevaron a investigar a fondo el negocio. Más bien, creyó que con las cuatro cosas que había aprendido en la academia para Mossos d’Esquadra podría resolver un caso tan peligroso. Se introdujo en la vida de Ferni poco a poco, primero con encuentros esporádicos, fiestas clandestinas y vermuts en el bar, hasta que cruzó una línea roja. Logró que Ferni se enamorara de ella, una forma de ganarse su confianza y descubrir cuándo tendría lugar la próxima entrega de droga. Con los días, su investigación terminó mezclándose con sus sentimientos, entre la culpa por mentir y la necesidad de buscar justicia.

La semana anterior, Ferni, sin esperarlo, descubrió la verdadera identidad de Naiara, una estudiante y futura Mossa que lo había engañado completamente. Una vez con las cartas sobre la mesa, la chica estaba atrapada entre sus mentiras y el propietario del bar la obligó a hacer la próxima entrega del cargamento de droga para hacer las paces. Han sido días de tensión en Com si fos ahir y los espectadores esperaban con ansias el resultado de esta trama. En este capítulo del jueves 17 de abril, Naiara se presentó en el lugar donde se encuentra el coche con las pastillas. Está visiblemente nerviosa y asustada, además, una vez ha localizado las drogas, comienza a tener la sensación de que alguien la está persiguiendo. Desesperada, hace una llamada para quedar con alguien, que no se sabe bien quién es. ¿Alguien cree que habrá pedido ayuda para salir del paso?

El castigo de Ferni trae una reconciliación
Por primera vez después de muchos días de decisiones pésimas, la chica ha decidido confiar en Karim (Moha Amazian) y contarle todo el lío. Está completamente alterada y sufre porque Ferni pueda hacer daño a las personas que ella quiere. Karim intenta animarla y ofrecerle soluciones, cree que deberían ir a comisaría, pero la chica sufre tanto por las consecuencias que al final terminan ambos con el problema entre manos: harán la entrega juntos. Una vez completada la misión, Karim acompaña a su amiga a casa, ahora que por fin parece que la trama de Ferni ha llegado a su fin. Sin embargo, es posible que esta aventura conjunta sea el inicio de una nueva etapa en su amistad. ¿Habrá lugar para la reconciliación?

Al día siguiente, Naiara recibe una última llamada de Ferni, que le confirma que están en paz, pero que lo que ha pasado entre ambos ha sido un golpe muy bajo. Era evidente que el propietario del bar se había enamorado de Naiara, pero seguramente los espectadores no eran conscientes de que entre ambos había algo más que una conexión física. Las últimas escenas antes de esta pausa temporal de la serie muestran cómo Ferni baja la persiana del bar y Naiara oculta las lágrimas tras la amarga despedida. Parece que es el final definitivo de su historia.

Cati está a punto de cometer una locura
Naiara no es la única protagonista de esta semana atípica. Hace días que los espectadores reflexionan sobre el futuro de Cati (Olalla Moreno) y Salvatore (Enrico Ianiello). Tras iniciar su relación de un día para otro gracias a la inauguración de la nueva pizzería del empresario italiano, fueron construyendo su historia entre mentiras y celos. Ante la sorpresa de todos, conociendo el carácter travieso y envidioso de Cati, la mujer perdonó sus faltas aceptando que se había enamorado. Salvatore, tras cumplir con la petición de su nueva novia de que se divorciara, decidió ir más allá y pedirle matrimonio. Sin embargo, quizá se apresuró al hacerlo porque ante el anillo de compromiso, Cati rechazó la propuesta porque estaba mucho más tranquila sin tener una etiqueta. El hombre no se lo tomó nada bien y en lugar de quedarse luchando, hizo las maletas y se volvió a Nápoles.

Cati ha estado destrozada en los últimos episodios, pero este jueves, después de recibir toda una serie de señales relacionadas con Italia -un plato de la Barnateca, una serie italiana y una borrachera sin sentido con Korinna (Mar Isern)- se da cuenta de que debe hacer algo. Tras beberse una botella de licor italiano con la novia de Marcel (Nil Cardoner), aunque al parecer ya no lo son más, lanza una moneda al aire para decidir su futuro. ¿La respuesta? Se va a Nápoles a buscarlo.

¿Será el final definitivo de su vida en Barcelona? Cargada de maletas, como si su viaje no fuera temporal, Cati se despide de su piso en la ciudad. ¿Estamos frente a la despedida de uno de los personajes más queridos por los seguidores de la serie catalana? Por ahora, los fieles espectadores de la serie de TV3 tienen unos días para asimilar todo lo que ha pasado.