La portavoz del grupo parlamentario de Esquerra Republicana de Cataluña y secretaría general adjunta de la formación, Marta Vilalta, anunció este martes por la noche que no formará parte de ninguna de las cuatro candidaturas a la presidencia del partido. Lo aseguró en una entrevista al Més324, en la cual ha dicho que «es una decisión tomada hace tiempo», que hasta ahora solo había verbalizado en una reunión interna, y porque cree que tiene que haber una renovación integral del partido. En este sentido, Vilalta comentó que a partir del 30 de noviembre, cuando se celebrará el congreso nacional del partido, se pondrá a disposición de la nueva dirección de ERC y que, hasta entonces, estará «comprometida con las responsabilidades» que tiene actualmente como secretaria general adjunta.
Preguntada sobre la estructura B del partido, Vilalta exclamó que la Ejecutiva Nacional ha tomado una serie de medidas y ha abierto cuatro expedientes sancionadores y que la investigación está en manos de la Comisión de Garantías, un órgano independiente que espera que esclarezca este asunto con la «máxima celeridad». La dirigente del partido añadió que espera que los resultados sirvan porque se asuman responsabilidades y, sobre todo, para poner las bases porque no se vuelva a repetir, porque «cuestiones como las de los carteles de señalar a los enfermos de Alzheimer no tienen cabida ni en Esquerra Republicana ni en la sociedad».
En este sentido, aseguró que se sintió avergonzada y reiteró e insistir a pedir disculpas a la familia Maragall y a todos los enfermos afectados por esta enfermedad y a sus familiares, alegando que lo harán «las veces que haga falta» y ha asegurado no saber quién ordenaba estas campañas.
Sobre el papel de Sergi Sabrià, que presentó su dimisión, aseguró que «cree que dio él mismo todas las explicaciones que creyó oportunas» y ha reiterado no saber quién está detrás de una cuestión de la cual el partido se avergüenza. «Estamos manchados», reconoció Vilalta, que comentó que su misión como partido ahora es recuperar la confianza, la honestidad e integridad que, en sus palabras, ha caracterizado a ERC a lo largo de su historia.
