Teresa Jordà (Ripoll,1972) ha sido escogida por Oriol Junqueras para hacer ticket electoral con Gabriel Rufián en la lista de ERC para presentarse a las elecciones del 23-J. Una elige anunciada al Consejo Nacional y que nadie todavía no ha votado. De hecho, la decisión llega después de que los republicanos intentaran encontrar un nombre de mujer de fuera del partido. Pero la estrategia de Pere Aragonès por justificar una crisis de Gobierno, y la investigación de un «Rufián con barretina», en palabras de uno de los veteranos de la formación, han llevado a elegir para la lista electoral la actual consejera d
Elige Jordà a última hora no es una novedad: ERC ya lo hizo el 2011 y, aquella vez, fue contra la opinión de Junqueras. De hecho, fue la sustituta de Quim Torra, entonces a Reagrupamiento, para la lista que ERC había pactado con su propia escisión para unas elecciones que eran la prueba de fuego de la nueva presidencia de los republicanos, después del relevo de Joan Puigcercós. Jordà había estado alcaldesa de Ripoll del 2003 al 2011, en plena vorágine del tripartito, y a la oposición se encontraba el ahora alcalde en funciones, Jordi Munell, que tenía como número dos Xavier Cima, lo exconvergent que dejó la política al comprometerse matrimonialmente con Inés Arrimadas.
Ayuntamiento de Ripoll y oficina de Correos
Jordà, licenciada en Historia, trabajaba a la oficina de Correos, a la cual se reincorporó después de perder la alcaldía. Pero también había estado guía del monasterio de Ripoll. Su reentrada en política, pero, vino de la mano del primer resurgimiento de ERC después del gran batacazo en las elecciones en el Parlamento del 2010 y en las municipales del 2011. Joan Puigcercós dejó la presidencia del partido y el congreso de ERC de septiembre del 2011, celebrado a Girona, escogió Junqueras como nuevo líder de la formación y Marta Rovira como secretaria general. De hecho, Junqueras era la gran esperanza blanca de los republicanos después de conseguir la alcaldía de Sant Vicenç dels Horts al frente de una coalición bautizada, curiosamente, como Juntos por San Vicenç.
La primera prueba de fuego electoral de Junqueras eran las elecciones españolas que José Luis Rodríguez Zapatero había convocado para el 20 de noviembre. Junqueras probó de rehacer la unidad independentista y consiguió que Reagrupamiento, liderado por el ex consejero y exdirigent de ERC Joan Carretero, se uniera a la candidatura. De hecho, ya lo habían probado en las municipales en Barcelona, con Jordi Portabella i Joan Laporta, entonces a Democracia Catalana, y con Ignasi Planas, secretario general de los reagrupados, y pudieron salvar los muebles con dos regidores.

Las elecciones de la unidad
El escogido por Junqueras seria Alfred Bosch, entonces encumbrado por el éxito de la consulta soberanista del 10 de abril del 2010 en Barcelona, que él había coordinado. Era la prueba de fuego para la dirección de Junqueras, y Bosch tenía que ganar las primarias ante un tándem supuestamente potente dentro del aparato del partido, formado por el exsecretario general y exportaveu de ERC a Madrid, Joan Ridao, y el eterno diputado también en el Congreso, Joan Tardà. Bosch y Junqueras encargó la campaña a un hombre clave de la federación de Barcelona, Oriol Amorós, y Ridao, a Ignasi Llorente, exportaveu de ERC. Bosch ganó comodíssimament, y Ridao solo lo derrotó en una mesa electoral.

Fortalecido por la militancia, Junqueras cumplió con el acuerdo con Reagrupamiento, a quien cedía el número cuatro por Barcelona y la cabeza de lista por Girona. El ungido de los carreteristes para Girona fue Quim Torra, entonces activista y editor. La decisión, pero, encontró una fortísima resistencia de la potente Federación de Girona de ERC, que no dudó a hacer frente en Calabria, la sede nacional del partido. Reagrupamiento se enfadó y dio por rota la coalición, pero entonces Josep Carrapiço, presidente de la federación gerundense y uno de los ingenieros de partido de ERC, y Carles Bonaventura, cabe de filas de Rcat a Girona, llegaron a un entendimiento para «conseguir independentistas a Madrid», rehicieron el pacto y acordaron Teresa Jordà y Rosa Cruz como tándem electoral por Girona.
La apuesta salió bien y ERC mantuvo tres diputados a Madrid, dos en Barcelona, Alfred Bosch y Joan Tardà, y Jordà por Girona, que obtuvo el escaño a última hora del recuento, gracias al diferencial de 153 votos con el PSC que provenían del voto exterior. Jordà continuó a Madrid tres legislaturas, hasta que entró al Gobierno, paradójicamente, de Quim Torra. De hecho, fue la única consejera que repitió después, cuando Pere Aragonès fue investido presidente en la actual legislatura, la que salió del 14-F. La gestión de la sequía ha sido uno de los puntos débiles de Jordà como consejera y, marchando a Madrid con Rufián, permitirá a Aragonés tener la excusa para poder reajustar el Gobierno.