El equipo de gobierno de Ripoll, gobernado por Aliança Catalana, ha censurado el cartel más votado de la Festa Major de Ripoll durante la Fira de las 40 horas, tal como se hace cada año. La imagen escogida era la obra de una autora que ha optado para hacer una propuesta colorista protagonizada por personas y personajes de todo tipo. El que no ha gustado a Sílvia Orriols, alcaldesa del municipio, es que a la parte de abajo aparecía una niña con velo tal como ha expresado por redes. Como que la autora se ha negado a sacarlo, finalmente el escogido será el que quedó en segundo lugar. Todos los partidos de la oposición han condenado en bloque este hecho, hablando de «censura», «despropósito» y «barrabasada».
Para la alcaldesa de Ripoll, la decisión de descalificar el cartel de entre los 10 más votados a la feria pasaba por «no normalizar la misoginia islámica». De hecho, esta ha sido su justificación y ha presumido en las redes sociales. A través de su cuenta de X, el antiguo Twitter, Orriols ha asegurado que esta es la decisión acertada. La comisión organizadora de la fiesta dio a conocer la decisión alegando una «decisión política totalmente aliena a la comisión de fiestas que ha comportado la renuncia de la ganadora». Y anunciante que, a consecuencia de esto, el segundo más votado pasará a ser el cartel oficial. Además, los partidos de la oposición lo han condenado de forma tajante al poco de conocer la decisión y exigiendo una rectificación.
Los partidos, en contra la decisión de Orriols
JxCat ha calificado la censura del cartel de «barrabasada» exigiendo al regidor de cultura «pedir perdón» por la retirada del más votado por «motivos políticos». ERC, por su parte, ha asegurado que «la obsesión de Sílvia Orriols con el velo hace cambiar el cartel de la Fiesta Mayor», mientras que el portavoz del PSC en la ciudad, Enric Pérez, también ha denunciado la censura: «Este es el nivel democrático que tenemos a Ripoll, la censura es dictadura». En una línea similar se ha expresado la CUP, calificando la decisión de «vergonzosa» y «negando la voluntad popular» expresada en la feria. Finalmente, el regidor de Manos a la obra Ripoll, Joaquim Colomer, ha hablado de «imposición» en la decisión del ganador y censura: «Vergonzoso y, como veis, la censura todavía existe a Ripoll». En definitiva, todos los partidos han denunciado el acto de Orriols y lo han tildado de censura, mientras ella presumía en las redes sociales.