Los diputados de Junts se han reunido este jueves al mediodía en el Parlamento para, oficialmente, «iniciar el curso político» y para, después, almorzar conjuntamente. Una reunión que tendrá continuidad dentro de quince días en Bruselas con el líder de la formación, Carles Puigdemont. Era un encuentro programado desde hace días, casi rutinario de cada año, pero la casualidad política ha querido que haya coincidido con la baja como diputado y del partido del exconsejero de Economía Jaume Giró. Una despedida que ha sido una sorpresa a medias porque muchos de los integrantes de los diputados juntistas sabían desde hace días de la incomodidad dentro del grupo y dentro del partido que sufría Giró.
«De hecho, le habían cortado las alas en cualquiera de sus iniciativas, como postularse como alcaldable para Barcelona, ir de cabeza de lista a Madrid o tener más protagonismo parlamentario», coinciden varias fuentes en El Món. Las mismas fuentes apuntan que la renuncia de Giró ha ocupado los primeros minutos del encuentro, y que el triunvirato que domina el grupo parlamentario, Albert Batet, Josep Rius y Mònica Sales, no han ocultado cierta incomodidad por la decisión del exconsejero.
En este sentido, recuerdan que la baja de Giró se suma a la de David Saldoni. «No estamos para ir perdiendo sábanas», comentan las mismas fuentes. Otras fuentes restan importancia a la decisión a pesar de lamentar la baja del exconsejero y así lo han expresado, con todo el cuidado, en la reunión del grupo, teniendo presente que Giró tampoco era santo de la devoción de Carles Puigdemont, quien realmente corta el bacalao en el partido. Los chats de la federación de Barcelona han echado humo todo el día por la decisión de Giró, que había hecho mucha campaña sobre todo en la parte alta de Barcelona.
En todo caso, el grupo parlamentario ha decidido no hacer una gran cuestión de ello y la actitud ha sido, según las mismas fuentes, de «paz y después gloria» y un «agradecimiento a los servicios prestados»

Una reunión preparatoria
El cónclave de hoy estaba pensado como un encuentro preparatorio y de reconexión después de las vacaciones de verano. Eso sí, llegaba después de la reunión entre el presidente en el exilio, Carles Puigdemont, y el presidente Salvador Illa en Bruselas, que tampoco se ha comentado en el encuentro. De hecho, ayer se explicó en la reunión de la «permanente nacional». Unos encuentros donde todos apuntan hacia sus inquietudes y preocupaciones.
En este sentido, este jueves en el Parlamento, uno de los puntos que se ha puesto sobre la mesa es que se necesita más coordinación entre el frente parlamentario de Madrid y el de Cataluña, la apertura de negociaciones en cuestiones como vivienda o seguridad, o la insistencia de la dirección del grupo sobre la importancia de la gestión y del relato para lograr el principal objetivo político de la formación que, en principio es la independencia. Del tono del encuentro se desprende que Junts aprovechará su situación de primer partido de la oposición y la brecha opositora que le deja ERC que, hasta ahora, ha cubierto parlamentariamente al Gobierno. Algunas voces del grupo, sin embargo, no ven clara esta opción si la formación no es capaz de crear un relato alternativo de cara a las municipales de 2027 o unas elecciones al Parlamento de Cataluña.