De la plaza Urquinaona hasta la plaza San Jaime y de estar reclamando la correcta aplicación de la ley de amnistía a acabar los parlamentos con cánticos contra una hipotética investidura de Salvador Illa. La Asamblea Nacional Catalana ha movilizado el independentismo, en la primera manifestación de Lluís Llach como presidente de la entidad, ante la incertidumbre política que atraviesa el país: elecciones pasadas el verano o una hipotética investidura del socialista Salvador Illa.
Precisamente el líder del PSC ha sido el foco de las críticas en los parlamentos finales en la plaza San Jaime, cuando Lluís Llach ha iniciado el cántico que pide a los partidos políticos independentistas no pactar la investidura del hombre fuerte del presidente español, Pedro Sánchez, en Cataluña: «Illa no!». Una petición que ha extendido para Esquerra Republicana de Cataluña, a quien ha pedido que “¡no nos haga presidente a Salvador Illa!”. «Sin independencia, Cataluña no tiene proyecto de futuro», ha sentenciado Llach.
⬛️⬜️ El presidente @lluis_llach inicia el cántico que pide a ERC que no pacte con el PSC: «Con Isla, no!» pic.twitter.com/89zefmnkx0
— Asamblea Nacional Catalana (@asamblea) July 13, 2024
La manifestación ha reunido 1.500 personas según la Guardia Urbana y ha salido desde la plaza de Urquinaona -plaza mítica para el independentismo desde el 2019- y ha bajado por la vía Laietana, donde se ha producido el momento más cargado de simbolismo, cuando los manifestantes han gritado «torturadores!» a los policías españoles de la jefatura de vía Laietana, todo mientras sonaba la canción
Piden aplicar correctamente la ley de amnistía
La manifestación, bajo el lema “Desobedecemos los jueces españoles: Independencia”, pedía que se aplicara correctamente la ley de amnistía, puesto que no todos los exiliados han podido devolver en Cataluña y que algunos de los policías españoles del 1-O se están beneficiando de la amnistía. El ANC ha criticado duramente la postura del Tribunal Supremo, denegando la aplicación de la amnistía para el presidente al exilio, Carles Puigdemont, Lluís Puig, Toni Comín y Oriol Junqueras, y ha denunciado que «el caso 23S de los CDR todavía está abierto y, en cambio, se ha aplicado inmediatamente a los 46 policías españoles acusados de delitos de torturas o tratos inhumanos por sus actuaciones lo Primero de Octubre.
Una crítica que ha compartido la diputada de la CUP en el Parlamento, Laia Estrada, quien ha acusado la Generalitat de dar «apoyo a la amnistía de policías»; la diputada cupaire también ha pedido que el Gobierno devuelva el importe de las sanciones a los independentistas procesados, puesto que en caso de no hacerlo estarían «colaborando con la represión». Precisamente la Generalitat, y su connivencia con los policías amnistiados, ha sido uno de los otros focos de las críticas y se ha tirado pan seco a las puertas del Palau de la Generalitat como protesta.
Quien también estaba presente a la manifestación ha sido la presidenta de Junts, Laura Borràs, que ha querido recordar «ayer celebrábamos una vuelta, pero quedan tres exiliados que no han podido volver». Borràs ha asegurado que «la justicia española hace que la democracia española sea defectuosa».