Filtran los secretos ocultos y las mentiras de ‘Pesadilla en la cocina’

Alberto Chicote vuelve a verse señalado por la presunta falsedad que habría en el programa de televisión de La Sexta Pesadilla en la cocina. Algunos exconcursantes han dejado caer que todo estaría guionizado y que lo que sucede no es tan real como fingen. Hasta ahora todo eran rumores, pero el canal de Cocina con Pablo ha hablado con unos cuántos participantes que no se han cortado a la hora de compartir los detalles ocultos más controvertidos de su experiencia.

La Taberneta fue uno de los restaurantes participantes en este programa de La Sexta. Sus propietarios, Ana y Walter, no se han cortado a la hora de sacar a la luz la realidad de las grabaciones. El primer ataque ha sido directo: «Nos pidieron que estuviéramos sin limpiar el restaurante los cinco días previos a la grabación y que dejáramos el congelador abierto. Vino un maquillador de alimentos que tienen y empezó a pasar un espray… Ellos llegaron un domingo, te piden las claves del local y vuelves doce horas después en los que llenan el restaurante de cosas».

Una pareja de exconcursants de ‘Pesadilla en la cocina dicen’ que todo es mentida

«Te dicen que vienen a grabar tu día a día normal para ayudarte a reflotar el negocio y, cuando hacía solo cinco minutos que habíamos empezado a grabar, nos dijeron que nos teníamos que cortar y empezar a darlo todo porque no podrían emitir aquello tan neutro. Tú has firmado unos papeles y tienes que hacer lo que te digan porqué en el contrato pone que si no tendrás que hacer frente a una multa altísima y pagar el sueldo de todo el equipo», han proseguido.

El suyo fue un capítulo muy polémico. Los dos han explicado cómo fue su experiencia: «Nos pusimos en contacto con ellos, nos hicieron entrevistas para poder hacer un perfil y nos dijeron que nos llamarían. Vinieron dos o tres meses después para firmar el contrato y empezó el rodaje. Yo lo hice con ilusión y creyendo que todo era realidad, no me esperaba que me dijeran que tenía que ser más expresivo porque nadie vería el programa si era aburrido«.

Los propietarios de La Taberneta revelan secretos de su experiencia con Alberto Chicote

«Nos estuvieron grabando durante siete días… Ellos te dicen que contestes de una manera impersonal para poder jugar con aquello. El problema es que tú respondes una pregunta en concreto y, a la hora de hacer el montaje, hacen ver que has respondido otra de las preguntas. A mí me han llegado a poner un cartel detrás de cámara en el que ponía «Llora ahora«… esto es cierto», han espetado en una confesión que deja en evidencia el programa.

Han dicho que muchas discusiones con Alberto Chicote son ciertas porque te pones muy nerviosa: «Vino uno de los presuntos clientes y me dijo fuera de cámara que no llorara, que simplemente le habían dicho que me tenía que tocar los cojones». Unas confesiones que ayudan a saber cómo son realmente las grabaciones en este programa.