A pesar de su ubicación soleada, España presenta altos niveles de déficit de vitamina D.
Una paradoja que inquieta a expertos y desmonta tópicos sobre la luz solar y la salud.
Después de los 45 años, el cuerpo produce menos vitamina D. Esta hormona esencial regula más de lo que imaginamos: desde la energía diaria hasta el estado de ánimo.
Una vitamina esencial está ganando protagonismo no solo por sus funciones tradicionales, sino también por su posible papel en la longevidad y la prevención del cáncer.
Un estudio revela que la vitamina D2 puede reducir los niveles de D3 en el cuerpo, abriendo un debate sobre la seguridad y la eficacia de los suplementos.
La dermatóloga Elena Martínez Lorenzo desmonta el mito sobre la vitamina D y el protector solar, explicando por qué la protección no impide su síntesis.
Un estudio clínico revela que la vitamina D puede mejorar la memoria y reducir la inflamación en pacientes con cirrosis avanzada, aportando una nueva herramienta terapéutica segura y efectiva.