Comienza la cuenta atrás para una de las fechas más destacadas del calendario eurovisivo. En poco menos de dos semanas se celebra la gran final de Eurovisión, pero el mes de mayo es el inicio de los primeros ensayos y las semifinales. El próximo 17 de mayo Basilea, Suiza, será la sede de la final de la 69ª edición del festival europeo de la canción y los candidatos comienzan a ultimar los preparativos para la semana eurovisiva. Las semifinales, los días 13 y 15 de mayo, permitirán descubrir las propuestas que competirán en la gran final. Melody, la representante española que ganó el Benidorm Fest con el tema Esa diva se despedirá este martes 6 de mayo con una fiesta organizada por RTVE.

Los cambios en la normativa de las banderas

Más allá del ambiente festivo que rodea este evento, hace años que las tensiones políticas han ido tomando cada vez más protagonismo. La pasada edición en el año 2024 en Malmö, Suecia, tras la segunda victoria de Loreen estuvo muy marcada por el conflicto entre Israel y Palestina. La descalificación del representante de Países Bajos pocas horas antes de la final y la tensión por la presencia de la representante israelí, que fue abucheada durante su actuación fueron los puntos calientes del festival. En esta edición de Eurovisión los cambios que ha aplicado la UER, la Unión Europea de Radiodifusión, el organismo que controla este festival, han hecho estallar la polémica, según ha publicado la cadena danesa DR.

La normativa afecta directamente a los artistas, que permite únicamente que puedan desfilar con la bandera nacional de su país. Por otro lado, el público podrá usar cualquiera que no infrinja las leyes suizas ni represente contenido discriminatorio. Según dice el citado medio, los organizadores quieren «evitar los mensajes políticos». Esto, por tanto, limita a los intérpretes a la hora de usar banderas del colectivo LGTBI, una escena que durante muchos años se ha repetido como una forma de expresión de los participantes pero también como objeto de reivindicación. Por otro lado, este 2025 se presenta un cambio sustancial porque se permitirá ondear la bandera palestina. Respecto a la primera decisión de las banderas, la cadena AVROTROS de Países Bajos ha comunicado que rechazan la prohibición y que apelarán la decisión.

Marco Mengoni, representante italiano de Eurovisión 2023 | RTVE
Marco Mengoni, representante italiano de Eurovisión 2023 | RTVE

Un historial problemático con las banderas

Aunque Eurovisión ha intentado mantener su independencia política, intentando centrarse únicamente en la música, cada vez es más frecuente que tome protagonismo, marcado sobre todo por los conflictos bélicos de los últimos años. Las banderas han generado problemas anteriormente, como el año 2019 con el grupo islandés Hatari, que mostró una bufanda con la bandera palestina durante la entrega de las votaciones, y terminaron multados.

Durante el desfile inicial de los artistas, muchos de ellos salen al escenario con la bandera de su país y aprovechan la exposición para mostrar abiertamente otros elementos como banderas de los diversos colectivos LGTBI, como el ganador del año 2024, Nemo, u otros representantes como Marco Mengoni (Italia) o Bambie Thug (Irlanda). Sea como sea, solo queda por ver cómo reaccionan los artistas las próximas semanas y si accederán a cumplir las normativas. Por su parte, Melody tiene garantizada su presencia en la gran final por el hecho de pertenecer al Big Five, el grupo de países con una contribución económica más alta a la UER.

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