El anuncio en noviembre de un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) en Telefónica alertó a sindicatos y trabajadores de la compañía, que hoy han conocido la primera oferta por parte de la empresa de telecomunicaciones. La compañía dirigida por Marc Murtra prevé despedir a 6.088 personas que forman parte de las empresas vinculadas (Telefónica de España, Móviles y Soluciones) preferentemente a través de prejubilaciones, replicando así las condiciones económicas del ERE que se efectuó en 2024, según ha anunciado UGT. Desde el sindicato ven “insuficiente” la oferta que Telefónica ha hecho a los representantes de la plantilla en la reunión que han mantenido este lunes.
La propuesta de Telefónica recoge varios tramos de renta para las personas nacidas antes de 1964 y hasta 1971 a quienes propondrán una prejubilación, con condiciones similares a las que se dieron en el expediente de regulación de hace un año.
Uno de los motivos de desacuerdo por parte de UGT se explica en el hecho de que la empresa mantiene la posibilidad de aplicar hasta 5.040 despidos forzosos, y además elimina la posibilidad de aceptar peticiones de voluntariedad en áreas consideradas críticas o no excedentarias, como por ejemplo las áreas digitales, donde tienen dificultades para retener a los trabajadores.

Las condiciones de UGT para llegar a un acuerdo
Por estos desacuerdos, desde el sindicato han comunicado a Telefónica que, en estas condiciones, no sería posible alcanzar un acuerdo, lo que “impediría activar cualquier despido dada la garantía de empleo vigente en el tercer convenio colectivo de empresas vinculadas a la compañía”.
En este sentido, las demandas de UGT pasan por que el ERE recupere la voluntariedad, la aceptación de solicitudes voluntarias, garantías para las personas “vetadas” en el ERE de 2024, protección del personal fuera del convenio, refuerzo del convenio especial con la Seguridad Social, compromiso “firme” de creación de empleo, “transparencia” sobre los elementos del proceso anterior, y una mejora de las condiciones y garantías que compensen la eliminación de la prima de voluntariedad.
Cuando se anunció por primera vez el ERE, Telefónica justificó este expediente debido a “causas organizativas, técnicas y de producción”.
Desde el gobierno español, que posee un 10% de la compañía de telecomunicaciones a través de la SEPI, Sociedad Estatal de Participaciones Industriales, aseguraron que el proceso debe contar con el acuerdo de los empleados.


