El presidente en el exilio Carles Puigdemont apuntala su posición desde Europa en medio de las negociaciones para la investidura de Pedro Sánchez. Puigdemont ha recordado, a este fin, un fragmento de su discurso en Bruselas del pasado 5 de septiembre en que aseguraba que «la independencia política es la única manera de continuar existiendo como nación» para Cataluña. El presidente, en una publicación en la red social X –antes Twitter– sostiene la reclamación de Junts que un voto favorable al nombramiento de Sánchez al frente de un nuevo ejecutivo español pase necesariamente para asegurar el camino hacia el pleno reconocimiento nacional del país, acotando así el precio que tendrá que pagar el Partido Socialista para atraer a los diputados catalanes en el Congreso.
En su publicación, Puigdemont ha aprovechado su propia intervención del pasado septiembre para reiterar el estatus de Cataluña como «una vieja nación europea», denunciando que la condición nacional del país ha sido «atacada por los regímenes políticos españoles desde el 1714». El presidente en el exilio vuelve a establecer nítidamente las reclamaciones de su partido hacia la negociación con los socialistas en un momento en que desde Madrid se cuestiona incluso la viabilidad legal de la amnistía. De este modo, Puigdemont recuerda que las concesiones desde la capital del Estado qué no pasen por comenzar el proceso de independencia no serán suficientes para resolver el conflicto político generado por los «ataques a la condición nacional» que describía en su intervención, recuperada hoy.
El PSC enfría las expectativas
El twit de Puigdemont ha coincidido este mismo domingo con las declaraciones del primer secretario del Partido de los Socialistas de Cataluña Salvador Illa intentando limitar el alcance de las reclamaciones de los independentistas. Para Illa, la investidura de Pedro Sánchez no es el momento para «buscar la foto, ni soluciones a situaciones que cada cual pueda tener, ni aprovechar la coyuntura para proyectos políticos en clave particular». En este sentido, Isla ha reclamado «un pacto dentro del marco de la Constitución» –un llamamiento a la orden que se aleja de la postura de un Puigdemont que, con su posicionamiento, niega la voluntad de renuncias por su parte al proyecto independentista–.
