El presidente en el exilio, Carles Puigdemont, ha hecho una declaración desde la Casa de la República, a Waterloo, para valorar la aprobación de la ley de amnistía en el Congreso de los Diputados y ha remarcado que la medida tiene un carácter «histórico» por «tres circunstancias concretas»: «es la primera vez que se concede una amnistía por razones políticas en más de 45 años», «hasta hace menos de un año, el partido que gobierna España se negaba en redondo y la descartaba de manera contundente» y porque «es la voluntad de los catalanes expresada a través de su Parlamento que, como se reconoce al acuerdo de Bruselas, ‘representa legítimamente el pueblo de Cataluña'». «La amnistía permite negociar en igualdad de condiciones», ha subrayado.
Puigdemont ha dejado claro que la aprobación de la ley no se ha hecho por «la voluntad de los partidos españoles» ni por «la de una parte minoritaria de la sociedad catalana», y ha insistido que ha sido posible gracias a «la voluntad tozuda del pueblo de Cataluña de hacer respetar sus decisiones». «Aquello que algunos definimos como mantener la posición, aquello que permitirá volver a la política el que no tenía que haber salido nunca», ha señalado, y, en este sentido, ha resaltado que «esto nos enseña que, por más que cueste tiempos e incomprensiones, hay que mantener la posición y saber aprovechar las oportunidades». «Y, aun así, la estrategia de la muerte civil a que nos querían condenar, hoy ha sido combatida con nuestra bastante. Sin ella, hoy no estaríamos aquí», ha constado Puigdemont, que ha añadido que esto «lo sabe el PSOE, lo sabe España y lo sabe todo Europa».
El presidente al exilio ha remarcado que el estado español «corrige un error», pero ha advertido que este «no es el único a corregir en la larga lista de errores cometidos por el Estado en relación con las demandas del pueblo de Cataluña» y ha recordado, por ejemplo, «el error de la sentencia contra el Estatuto». «Pero era imprescindible corregirlo por poder negociar desde cierta igualdad de condiciones y sin la amenaza de la represión», ha remachado. Así mismo, ha recordado que la amnistía formaba parte del acuerdo de investidura del presidente Pedro Sánchez. En este sentido, ha dicho que «han pasado seis meses y medio desde entonces, y hoy se cumple una de las condiciones que pactamos». «Hoy nos hemos sacado las espinas de los pies que nos impedían avanzar», ha sentenciado antes de hacer un reconocimiento a los miles de ciudadanos que «sufren la represión, por su paciencia y comprensión».

Comín destaca la internacionalización del conflicto para lograr la amnistía
El candidato a las elecciones europeas de Junts, Toni Comín, que toma el relevo de Puigdemont como cabeza de lista, ha calificado la aprobación de la amnistía como «una gran victoria del independentismo». «Mentiría si no os digo que he estado esperando este día con mucha esperanza», ha dicho en una atención desde la Bienal de Venecia, donde ha subrayado que «ahora vemos la puerta que nos permitirá volver libras a casa». Comín ha defendido que internacionalizar el conflicto en el coro de las instituciones europeas ha tenido un papel «muy importante» que ha servido para «poner las bases narrativas de la amnistía». «Con nuestra lucha, los tribunales internacionales han señalado que el Estado vulnera los derechos internacionales», ha remarcado.
Además, ha destacado que la medida se ha conseguido «sin pagar ningún precio político» y cree que con su aprobación el estado español está reconociendo de forma implícita que «se equivocó». Así, ha asegurado que «por coherencia con el movimiento independentista, no renunciamos a reivindicar la legitimidad y la legalidad del referéndum del 1-O, a la declaración de independencia, y tampoco se habla de renunciar a la vía unilateral». «Es una amnistía que se ha conseguido a cambio de siete votos, pero sin pagar ningún precio político», ha insistido.