China impondrá a partir de este martes aranceles provisionales de hasta el 42,7% a algunos productos lácteos de la Unión Europea. Estos aranceles se dan al mismo tiempo que el Ministerio de Comercio chino ha anunciado que se abre una investigación sobre la concesión de subsidios a la industria europea de productos lácteos. Desde las autoridades chinas culpan a la Unión Europea de causar “un daño sustancial” a la industria láctea con las ayudas públicas al sector europeo. Desde la Comisión Europea ven este movimiento “con preocupación” y acusan a Pekín de abrir una investigación “sin pruebas suficientes”. La investigación debería concluir el 21 de febrero con la imposición o no de aranceles definitivos.
Más concretamente, el Ministerio de Comercio chino ha anunciado que los gravámenes se encuentran entre el 21,9% y un 42,7% a una sesentena de empresas europeas. Este porcentaje se reduce en aquellas compañías que “han cooperado” en la investigación, a las que se les ha aplicado un arancel del 28,6%. En este caso, una empresa catalana, concretamente de Mollerussa, se ve afectada por este gravamen.

Medidas «injustificadas e innecesarias»
Desde la Comisión Europea ven con “preocupación” este movimiento y consideran que las medidas “son injustificadas e innecesarias”, según ha dicho el portavoz de la CE, Olof Gill. Desde Bruselas aseguran que tomarán “todos los pasos necesarios para defender los derechos de los productores europeos”. Desde el ejecutivo europeo están analizando si China cumple con las normas de la Organización Mundial del Comercio mientras esta se encuentra en marcha.

A pesar de este anuncio “negativo”, la Comisión Europea ha recordado que el posible acuerdo sobre precios de las baterías eléctricas es un cambio “positivo” en la relación comercial con China. “Seguimos comprometidos a fortalecer la relación comercial, económica y de inversión entre la UE y China para un beneficio mutuo. Pero, para que esto ocurra de manera significativa, hay una lista de problemas y preocupaciones que la Unión Europea tiene desde hace muchos meses, incluso años”, ha destacado Gill.
Otras cuestiones arancelarias con China
En los últimos meses, las relaciones comerciales entre la Unión Europea y el gigante asiático también han sido cuestionadas en cuanto a otros bienes. En octubre la CE denunciaba nuevas prácticas comerciales “injustificadas” de China por las restricciones impuestas sobre la exportación de minerales raros. Desde China se expandió la lista de minerales raros sometidos a un control de exportaciones más estrictas que restringía el acceso de estas materias al conjunto de la UE, además de Estados Unidos y otros países. Un hecho que causa “muchos problemas y complicaciones” para las industrias europeas, especialmente en ámbitos como las renovables o la producción de chips, que necesitan estos materiales para su funcionamiento.

Por otro lado, continúa la crisis de peste porcina africana en Cataluña, lo que ha hecho reducir los aranceles al cerdo catalán por parte de China. En concreto, se rebajaron las tasas a la importación hasta el 9,8%, un descuento de más del 50% respecto del 20% que se aplicaba anteriormente. Este hecho surge después del resultado favorable de una investigación del mismo gobierno de Pekín sobre posibles instancias de competencia desleal en la industria cárnica europea, una ofensiva que lanzó en plena batalla por las fronteras arancelarias del coche eléctrico con la Comisión Europea. El premio llega después de que empresas del país como Carns Juià, Costa Food, Noel o Friselva hayan colaborado con la investigación del ministerio respecto de la relación comercial con la UE.
