El ministerio de Agricultura ha confirmado tres casos más de peste porcina cerca de Cerdanyola del Vallès (Vallès Occidental) y eleva a 16 la cifra total de jabalíes muertos por la epidemia. A pesar del aumento constante de casos en las últimas semanas, los servicios oficiales de veterinaria de la Generalitat de Cataluña han revisitado el medio centenar de explotaciones ganaderas que hay en un radio aproximado de 20 kilómetros alrededor de la zona cero y aseguran que no hay ninguna granja afectada. Desde el gobierno español también resaltan que el resto de 115 cadáveres analizados en este nuevo lote en el laboratorio de Algete (Madrid) han dado resultados negativos.
Sobre el terreno, los equipos de la Generalitat continúan trabajando para reducir la interacción entre jabalíes. El Cuerpo de Agentes Rurales ha precintado seis kilómetros del foco principal, en Cerdanyola del Vallès, para tener controlada la fauna que vive allí. En total se han clausurado con vallas un total de 33 pasos por donde habitualmente transitan los jabalíes de la zona más afectada. Los Agentes Rurales especifican que estas vallas continuarán estando hasta que termine la epidemia.
Flexibilización del acceso a la zona afectada
La Generalitat de Cataluña mantendrá la prohibición de poder acceder a las zonas naturales afectadas el fin de semana, pero comenzará a flexibilizar las restricciones a partir del lunes. El consejero de Agricultura, Òscar Ordeig, ha confirmado este viernes en una rueda de prensa que las grandes actividades de ocio continuarán prohibidas, pero que el Gobierno permitirá ir «a pasear o en bici solos». El consejero ha recordado la situación, aún crítica, y ha defendido que la idea es, a pesar de permitir parcialmente el acceso, «no llevar grandes aglomeraciones de gente» a la zona afectada. Esta flexibilización solo afecta el segundo radio de acción, que integra las zonas que están alejadas a seis kilómetros o más del principal foco del brote de la peste.
En una comparecencia en el Parlamento de Cataluña, el mismo consejero ha insistido en que siguen trabajando para controlar el brote y ha dejado claro que «sobran jabalíes» en Cataluña. El ejecutivo aspira así a reducir a la mitad la población actual de jabalíes de Cataluña, que en estos momentos se sitúa entre los 125.000 y los 180.000 cerdos en función de la época del año. En esta línea, el Gobierno mantiene el firme compromiso de eliminar cerca de 60.000 ejemplares a medio plazo.
Primera reunión del comité de expertos
Por otro lado, los expertos nombrados por el ministerio para abordar la crisis de la peste porcina africana ya se han reunido y se comprometen a tener un primer informe sobre el brote en el período de un mes y medio. Este análisis debería señalar las causas y el origen del virus y establecer medidas a medio y largo plazo. El equipo está formado por seis científicos y una tripleta directiva encabezada por un presidente. La primera reunión ha fijado los principales objetivos de los próximos trabajos.

Las autoridades insisten en recordar que la peste porcina es un tipo de virus que no afecta directamente a los seres humanos, pero sí genera problemas económicos de gran envergadura en el sector. La declaración de diferentes focos de peste ha llevado a cerca de una cuarentena de países a frenar su actividad comercial con Cataluña.
