Foment del Treball continúa su campaña para actuar como escudo de unos empresarios que consideran maltratados por la sociedad. El presidente de la patronal, Josep Sánchez Llibre, ha lamentado que tanto en Cataluña como en España «demasiado a menudo colocan al empresario en el punto de mira, y se le trata como un presunto delincuente«. Lo ha dicho desde la gala de entrega de los premios anuales de la entidad y las Medallas Carles Ferrer Salat. Sánchez Llibre ha centrado su intervención en reivindicar la figura del empresario, que considera «la auténtica columna vertebral de la economía productiva«. Como primera línea de defensa, ha recordado el manifiesto que hizo público la patronal el pasado mes de julio, una serie de medidas «para corregir los puntos débiles e impulsar las mejoras que necesitamos».
Para el líder empresarial, «cuestan de entender los ataques que constantemente recibimos los empresarios»; en una carga que alerta que «se está extendiendo como una mancha de aceite» por la sociedad catalana. Ha quitado la culpa al empresariado de la oposición social que a menudo se gana: «no solo no hacemos nada malo, cumplimos las leyes y generamos riqueza y trabajo». Como ejemplo de esta labor empresarial, ha alabado la actividad de la Fundación la Caixa y, en concreto, la del presidente Isidre Fainé. «Ojalá hubiera más entidades y más dirigentes con esta visión para revertir desigualdades sociales, que es el gran punto débil de nuestra realidad», ha reflexionado.
En este sentido, ha exigido a «parte de las administraciones públicas», de parte del mundo privado, que «se nos deje hacer». «Reclamamos respeto a los empresarios y a su aportación a la sociedad y respeto a la propiedad privada», ha enfatizado; sin mencionar los partidos de izquierdas y los movimientos sociales que a menudo concentran sus críticas. Contra los ataques que busca en el exterior, ha recordado las palabras del fundador de la cadena estadounidense de supermercados Walmart, Sam Walton, que aseguraba que «los grandes empresarios ven oportunidades donde los demás solo ven problemas». «Por eso es necesario, de manera contundente, respeto por las empresas», ha sentenciado.

Los retos del país
El gran reto de las administraciones frente al empresariado, a ojos del presidente de Foment, es el de la productividad. «Disponemos de menos renta disponible que la media europea, y esto hace que el grueso de la clase media se vaya empobreciendo», ha lamentado Sánchez Llibre. Para afrontar este agujero que padece la economía catalana, la patronal ha recuperado algunos de los puntos de su hoja de ruta. El dirigente ha vuelto a algunas de sus reivindicaciones clásicas, como las rebajas fiscales.
Entre otras cuestiones, reclama «eliminar impuestos que desincentivan la inversión», como el de Patrimonio, y recortar otros, como el de Sucesiones. También ha hecho referencia al principal caballo de batalla del mundo de los negocios catalán en los últimos años: la lucha contra el absentismo laboral y los retrocesos en materia de trabajo. En este sentido, ha reiterado la oposición frontal de la entidad a la reducción de la semana laboral a 37,5 horas; y ha asegurado que «cada día hay 1,6 millones de españoles que no van a trabajar», con un coste estimado de 37.000 millones de euros.
También se ha referido a la necesidad de una mejora en el ámbito de las infraestructuras estratégicas, entre las que destaca Rodalies y el Aeropuerto del Prat, con una inversión anual de 5.500 millones de euros «por parte de todas las administraciones». En este ámbito también ha incluido el Hard Rock, un «proyecto tractor», a su parecer, para Cataluña. Ha dado continuidad, además, a la campaña que comparte con las derechas españolas a favor de las centrales nucleares, que considera -contra la mayoría de voces del sector energético- complementarias con el desarrollo de las renovables. Finalmente, ha compartido con el Gobierno de Salvador Illa la necesidad de «simplificar trámites y eliminar cargas administrativas» con una reforma del sector público que sirva para recortar la burocracia en el Principado.
La gran noche de Foment ha sido guiada por la presentadora del Telenotícies de 3Cat, Ariadna Oltra, y ha contado con la presencia del presidente de la Generalitat, Salvador Illa, y el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni; así como del presidente del Banc Sabadell, Josep Oliu, que ha recibido la Medalla Carles Ferrer Salat al Empresario del Año. También se han dejado ver el presidente del Parlamento, Josep Rull, y los consejeros de Economía y Finanzas, Alícia Romero; de Empresa y Trabajo, Miquel Sàmper, y de Unión Europea y Acción Exterior, Jaume Duch, entre otros.


