Las exportaciones catalanas fan un nuevo salto. Las ventas al exterior del tejido empresarial del país escalan durante el primer semestre un 14,5% en términos interanuales, hasta los 53.217 millones de euros. Según los últimos datos del ministerio de Industria, Cataluña ya genera el 26,6% del conjunto de la actividad comercial internacional del Estado en una primera mitad del año claramente alcista. El conjunto de la facturación exportadora española, de hecho, se queda frotando los 200.000 millones de euros, un nuevo récord que supone un crecimiento en comparación con el mismo periodo del 2022 del 4,7%. En cuanto a las importaciones, el crecimiento interanual es más moderado, del 4,2%, hasta los 57.969 millones de euros. Así, Cataluña recorta el déficit comercial hasta los 4.479 millones, poco menos de la mitad del que se registraba a cierre de junio del 2022 (8.900,9 millones).
Por sectores, como ya es tradición, la industria química y el sector del automóvil lideran con margen las ventas internacionales de las empresas del país. El valor de las exportaciones de coches, de hecho, se ha disparado un 77,4% en un año, hasta los 8.641 millones de euros, un 16,2% del total de la facturación internacional catalana. Los químicos, pero, continúan liderando con mucho el mercado global, con más de un 30% de las exportaciones totales del país y una mejora próxima al 10% en términos interanuales. También los bienes de equipación registran una importante levanta año a año, superior al 12%, y ya suponen el 15% del conjunto de las exportaciones catalanas.
En cuanto a las importaciones, la tendencia es la misma: la química concentra la mayoría de la compras exteriores del país, con poco más de 14.100 millones de euros, a pesar de que en este caso registra un descenso próximo al 8%. Los bienes de equipo escalan un 6,5%, hasta los 10.537 millones de euros; mientras que las adquisiciones internacionales de las empresas automovilísticas se disparan un 71,2%, hasta los 8.206,7 millones de euros.
Barcelona encabeza el país
EL alta concentración de empresas exportadoras en Barcelona hace que la capital del país acapare la inmensa mayoría de la facturación exterior catalana. Según los datos del ministerio, el tejido barcelonés acumula más de 42.270 millones de euros en ventas; mientras que las importaciones a la demarcación se elevan hasta los 45.622 euros, el que deja un déficit comercial de unos 3.352 millones de euros. Las exportaciones tarraconenses crecen un 1,4%, hasta frotar los 5.500 millones, mientras que Girona supera los 4.100 millones de euros en mercados internacionales después de crecer un 7,7% año a año. Lleida, con una alza próxima al 2,5%, ha vendido productos a empresas foráneas por valor de unos 1.345 millones de euros.