El BBVA y el Sabadell se han denunciado mutuamente ante la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) por malas prácticas con los accionistas del banco catalán que están interesados en acudir a la OPA. Por un lado, el BBVA asegura que la red de oficinas del Sabadell dificulta el intercambio a los accionistas que quieren acudir a la OPA, mientras que el Sabadell acusa al BBVA de dar información limitada sobre la letra pequeña de la OPA. En ambos casos, las denuncias se basan en la técnica del mystery shoppings, que consiste en enviar agentes de incógnito para comprobar cómo funciona la comercialización de ciertos productos o, en este caso, cómo es la atención al cliente interesado en la OPA.
En concreto, el banco vasco ha denunciado que los gestores del Sabadell, cuando un cliente llega a una oficina para aceptar la OPA o simplemente pedir más información, instan a los usuarios a ir a una oficina del BBVA. En otros casos, no facilitarían la información necesaria para poder tomar una decisión informada. Fuentes del BBVA explican que han puesto su red de oficinas a disposición de los accionistas del Sabadell que quieran completar el proceso sin coste alguno, tanto si son clientes como si no, e independientemente de dónde tengan las acciones del Sabadell. La entidad que lidera Carlos Torres se habría asegurado hasta ahora el 10% de las acciones del Sabadell.

Por su parte, el Sabadell denuncia que el BBVA ofrece información limitada a los accionistas interesados en el intercambio. Los estudios del banco catalán señalan que los gestores del BBVA no mencionan de “manera espontánea“ el impacto fiscal de aceptar la OPA, sino que solo lo mencionan si el cliente lo pide. También acusa al banco de dar información “errónea” sobre impuestos y plusvalías y que estarían incentivando una venta “inmediata” para aceptar el intercambio ante el riesgo de perder valor en caso de no acudir. La entidad catalana ha realizado trabajo de campo en varias oficinas del BBVA y a través de sus call centers.