Viure bé
Perillos invisibles: aumentan los casos de intoxicación por suplementos de vitamina D sin supervisión

Aunque pueda parecer inofensiva, la ingesta de vitamina D sin supervisión médica puede conllevar riesgos importantes. En los últimos años, su consumo se ha disparado, motivado principalmente por la creencia extendida de que refuerza las defensas y favorece la salud general. Sin embargo, profesionales sanitarios y organismos de salud pública advierten sobre los peligros de la automedicación y del consumo excesivo de esta vitamina sin un control médico adecuado.

El consumo desenfrenado de suplementos puede derivar en problemas de salud que van más allá de lo esperado. Las redes sociales y algunos medios de comunicación han contribuido a que muchas personas adopten la vitamina D como un “remedio milagroso” para diversas dolencias, sin considerar que un exceso puede causar efectos adversos graves.

La vitamina D juega un papel fundamental en la absorción de calcio y en el mantenimiento de huesos saludables. Además, varios estudios han relacionado niveles adecuados de esta vitamina con un mejor estado inmunológico y reducción del riesgo de algunas enfermedades. Estos beneficios han contribuido a que muchas personas la incorporen a su rutina diaria, ya sea por prescripción médica o por su cuenta.

No obstante, la realidad es que no todas las personas necesitan suplementos de vitamina D, y su ingesta debe estar ajustada a las necesidades individuales. “Estamos viendo más casos de hipercalcemia por suplementos que por alimentos”, señalan desde el Hospital La Paz en Madrid, advirtiendo que el exceso de vitamina D puede alterar el equilibrio del organismo.

Los riesgos invisibles del exceso

El principal peligro de una sobredosis de vitamina D es la hipercalcemia, un trastorno caracterizado por niveles excesivos de calcio en la sangre. Este exceso puede ocasionar síntomas como náuseas, vómitos, debilidad muscular, confusión e incluso daño renal grave. Además, puede afectar el corazón y otros órganos vitales.

El mecanismo por el cual la vitamina D se vuelve tóxica está ligado a su función en la regulación del calcio. Cuando se consume en dosis muy altas, el cuerpo no puede eliminar el exceso, lo que lleva a una acumulación peligrosa. “La vitamina D puede volverse tóxica si se abusa de ella”, advierte la clínica Mayo, haciendo hincapié en que el seguimiento médico es imprescindible para evitar complicaciones.

Casos reales en hospitales españoles

Durante los últimos años, los servicios de urgencias y consultas especializadas han notado un aumento significativo en pacientes con problemas derivados del consumo irresponsable de suplementos de vitamina D. Muchos de estos casos se deben a la automedicación sin análisis previos ni supervisión.

Médicos de atención primaria y farmacéuticos han alertado que la tendencia a comprar estos productos sin receta ha llevado a intoxicaciones, especialmente en personas mayores y en quienes utilizan varios suplementos de manera simultánea. “Es importante que el público entienda que, aunque la vitamina D es esencial, no es una panacea y puede causar daños si se usa incorrectamente”, insisten expertos en salud pública.

La guía médica: cuándo sí y cuándo no

La recomendación principal es que la suplementación con vitamina D se debe hacer exclusivamente bajo prescripción y control médico. Antes de iniciar un tratamiento, es vital realizar un análisis sanguíneo que determine los niveles reales y la necesidad del suplemento.

Los especialistas indican que en casos de deficiencia comprobada, como en personas con poca exposición solar, ciertas enfermedades óseas o trastornos de absorción, la vitamina D puede ser un aliado esencial. Pero su administración debe ser cuidadosa y ajustada en dosis y tiempo.

Además, el papel del farmacéutico es clave para informar a los usuarios y evitar el uso indiscriminado. Es habitual que los suplementos estén disponibles sin receta, pero la falta de asesoramiento puede convertir un suplemento en un riesgo para la salud.

Más información, menos suplementos

En un mundo donde la cultura del bienestar y la suplementación crece sin freno, es imprescindible adoptar un enfoque crítico y responsable. ¿Cuántos de nosotros hemos tomado suplementos sin saber si realmente los necesitamos? La vitamina D es necesaria para el organismo, pero su consumo sin supervisión puede conllevar consecuencias graves.

Antes de recurrir a la automedicación, es fundamental consultar a profesionales sanitarios y realizar las pruebas pertinentes. Solo así se garantizará un uso seguro y efectivo, evitando los peligros ocultos que conlleva el abuso.

Infórmate bien, consulta a tu médico y no conviertas un aliado en un enemigo. Comparte esta información para que más personas conozcan los riesgos y beneficios reales de la vitamina D.

Nou comentari

Comparteix

Icona de pantalla completa