Uno de los grandes problemas de la Unión Europea es el exceso de burocracia. El que a la práctica tendría que ser una unión para compartir información y facilitar las cosas entre los estados europeos, se acaba convirtiendo en uno sin fin de papeleo. Por eso, la Comisión Europea ha propuesto establecer un nuevo sistema de intercambio de información entre los estados miembro que posibilitará un ahorro de hasta 437 millones de euros para las empresas europeas.
Esta iniciativa presentada por el ejecutivo comunitario se ha hecho con el objetivo de reducir burocracia e incrementar la transparencia en todo la Unión. Además, desde Bruselas defienden que la medida permitirá a las compañías que no tengan que volver a enviar la información cuando establecen subsidiarias o nuevas ramas en otros estados miembro porque ya estará disponible en el registro común. El plan de la Comisión Von der Leyen también prevé crear un certificado europeo empresarial que incluya la información esencial de la compañía disponible para todos los estados y establecer poderes notariales digitales para que las compañías puedan autorizar una persona a representarla en otro estado miembro.
La propuesta de la Comisión Europea también incluye que las empresas no tengan que obtener una apostilla en documentos certificados, registros empresariales o poderes notariales cuando los documentos se presenten en otro estado miembro. También reduce las necesidades de traducciones certificadas de los documentos de la empresa o la información que hay que dar en los registros.
Según el ejecutivo comunitario, todas estas medidas acabarán ahorrando un total de 437 millones de euros de carga administrativa a las empresas europeas. Además, Bruselas también defiende que la medida actualiza las normas aplicadas a las compañías, con más preparación en el ámbito digital, y mejora la transparencia porque hace más fácil acceder a la información de las empresas.
Proteger los estados contra los chantajes
El nuevo plan para reducir la burocracia europea, no ha sido la única decisión tomada en las últimas horas. Este martes lo Parlamento Europeo y el Consejo de la Unión Europea llegaron a un acuerdo para impulsar una regulación que proteja los estados miembros de chantajes por parte de países terceros. Bautizado con el nombre ‘de Instrumento Anti-Coerción’, el texto pactado incluye medidas como el encarecimiento de las exportaciones, subir el precio de los derechos de aduana o restringir el abastecimiento de servicios.
En cualquier caso, tanto el Consejo como el Eurocámara apuntan que este instrumento está diseñado para desescalar tensiones y que siempre se apostará por el diálogo como primera opción. «Cualquier medida restrictiva adoptada por la Unión Europea se aplicará como último recurso», aseguró el Consejo. Este acuerdo, pero, todavía tiene que ser ratificado por las dos instituciones, una vez se llegue a esta ratificación por parte de las dos partes, la regulación aparecerá al diario oficial de la UE y entrará en vigor veinte días después de su publicación.