Podemos mantendrá hasta el último momento la incógnita sobre su voto a la polémica reforma fiscal pactada entre el gobierno español y Junts que se debate este jueves en el Congreso de los Diputados. La formación morada es el último partido que queda por negociar la medida, que ha levantado mucho polvo por el futuro de los impuestos a los bancos y a las compañías energéticas, que Podemos considera “imprescindible” y que debe incluir un “mínimo de recaudación” más allá de posibles deducciones.
El portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, ha pedido a Podemos que no tumbe el decreto de medidas fiscales porque tendría “consecuencias económicas y legislativas”. Rufián ha asegurado que comparte el diagnóstico que hacen los de Ione Belarra, pero ha defendido que la solución no es votar contra la reforma fiscal. Asimismo, el diputado republicano se ha mostrado “absolutamente convencido” de que el gobierno español mantendrá su palabra y aprobará un nuevo decreto para prorrogar el impuesto a la banca antes del 31 de diciembre.

Por su parte, el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, ha insistido en que las negociaciones continúan abiertas y ha confiado en que llegarán a un acuerdo para sacar adelante un paquete fiscal “progresista”. Bolaños ha defendido que, si hay un acuerdo, “debe ser uno en el que se sienta cómoda la mayoría de la cámara» y ha adelantado que cuando haya algo que comunicar, se hará público. “Estamos trabajando”.
Podemos quiere garantías sobre el impuesto a las energéticas
La secretaria de Podemos y diputada en el Congreso, Ione Belarra considera que los dos impuestos deben mantenerse y ha acusado a Pedro Sánchez “de esconderse detrás de Junts” para tumbar el impuesto a las energéticas. “Aún no hay acuerdo, nosotros siempre tenemos los teléfonos abiertos, pero debo decir que estoy muy preocupada”, ha dicho Belarra en una entrevista en TVE. Según la diputada, han ofrecido dos opciones al PSOE para votar a favor de la reforma fiscal, pero ha asegurado que los socialistas las han descartado.

“El gobierno no quiere garantizar ni un pequeño mínimo de recaudación de este impuesto a las energéticas, lo que significa que ese acuerdo que dicen que firmaron con Bildu y Esquerra el lunes es mentira. No están dispuestos a garantizar un mínimo de recaudación”, ha lanzado. Podemos considera que el impuesto a las energéticas quedará “desdibujado” si se aprueban exenciones fiscales por descarbonización. “Si de verdad pactaron con ERC y con Bildu el lunes pasado que habrá gravamen el próximo año, que habrá impuesto, que se comprometan con nosotros a garantizar que este impuesto existirá, que no llevarán el Real Decreto al Congreso para perderlo, que es lo que se nos ha transmitido”.
Negociaciones in extremis y choque entre Junts y ERC
Junts, con la colaboración del PNB, había negociado un paquete fiscal con el PSOE que mantenía el impuesto a la banca, pero descartaba el de las eléctricas, un movimiento que no gustó nada a ERC, Bildu y BNG. Ambos impuestos se crearon en 2022 como un tributo temporal que finaliza a finales de año, pero ahora el gobierno español busca la manera de convertirlos en permanentes a pesar de las críticas de los dos sectores afectados.
Después de una jornada maratoniana de negociaciones durante toda la tarde y la noche del lunes, la Moncloa logró conseguir que los partidos de izquierdas apoyaran el dictamen de la Comisión de Hacienda y se comprometieran a aprobar el impuesto especial a la banca, que se vota este jueves, tras arrancar el compromiso al PSOE para tramitar el impuesto a las energéticas a través de un Real Decreto.