La economía catalana cerró el 2024 con un crecimiento del producto interior bruto (PIB) del 3,6%, lo que supone un punto más que el dato registrado en 2023, que era del 2,6%. Son datos que surgen de la estimación avanzada del Instituto de Estadística de Cataluña (Idescat) y que muestran una buena evolución en prácticamente todos los sectores. Todos ellos mejoran, de hecho, excepto el sector de la construcción, que mantiene las mismas cifras que el año anterior. El último trimestre del año se cerró con un crecimiento del 3,9%.
El sector industrial –que crece hasta el 4%, cinco décimas más que en 2023– es uno de los principales responsables. La evolución de las ramas de fabricación de vehículos de motor, la industria farmacéutica y la industria alimentaria explican el crecimiento. El sector servicios también mejora y alcanza el 4,1%. En parte por el impulso de la hostelería, la restauración, las actividades jurídicas, los servicios de seguridad, las actividades de programación y consultoría y el pequeño comercio.
La agricultura es el otro gran sector que registra un aumento destacado, del 4,1%. Un valor importante en un año marcado por las protestas campesinas y después de cerrar dos años seguidos con números negativos. En cambio, el sector de la construcción no logra superar las cifras del año anterior, si bien tampoco bajan, se mantienen en el 1,8% registrado en 2023.

El PIB catalán supera el del Estado
El PIB catalán ha cerrado el año 2024 con una tasa superior a la registrada en el conjunto del Estado. El PIB español es del 3,2%. La economía catalana también crece por encima de la Unión Europea, que se queda en un 0,8%, y de otros países como Alemania (-0,2%), Francia (+1,1%) o Italia (0,5%).
En cuanto exclusivamente al cuarto trimestre de 2024, la tendencia es prácticamente la misma. El PIB catalán entre octubre y diciembre (del 3,9%) es superior cuatro décimas más alto que el 3,5% del Estado y casi tres puntos más alto que el 1,1% de la Unión Europea.