La flexibilización de la política monetaria por parte de los principales bancos centrales del planeta continúa según el guion previsto por los mercados, a pesar del impacto de las elecciones presidenciales estadounidenses. Tal como se esperaba, la Reserva Federal ha anunciado una segunda reducción de los tipos de interés en la reunión de este mes de noviembre. Con este movimiento, el costo del crédito para familias y negocios cae hasta el 4,5%-4,75%, el nivel más bajo desde principios de 2023. El organismo presidido por Jerome Powell celebra la «continua expansión de la economía», así como la buena salud del mercado laboral y la «sostenida» caída de la inflación. Cabe recordar que el IPC de la federación cayó hasta el 2,1% el pasado mes de octubre, rozando ya el objetivo general de dos puntos. «El comité -reiteran- está fuertemente comprometido con la reducción del desempleo y retornar la inflación» a la normalidad. Según el banquero, nuevos endurecimientos estarían descartados, ya que «no es necesario enfriar más la economía para detener» la curva de precios. Queda por confirmar, pues, el ritmo de las bajadas.
A pesar de la seguridad que muestran respecto al mercado laboral y los movimientos del costo de vida, los gobernadores de la Fed reconocen que «el futuro económico es incierto». De esta manera, la dirección monetaria de Estados Unidos asegura estar «atenta a los riesgos en ambos lados de su mandato dual» -la reducción del desempleo y la contención de precios-. La reunión del comité monetario, que se extiende durante dos jornadas, se ha producido pocas horas después de la amplia victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales estadounidenses. Trump, cabe recordar, se ha impuesto a su rival, la demócrata Kamala Harris, con un programa económico de intensas rebajas fiscales y duras imposiciones arancelarias.
El aumento de la actividad generado por la reducción de impuestos, unido a la escalada de los precios provocada por el movimiento proteccionista -según un estudio de la patronal comercial NRF, tendrán un costo de 78.000 millones de dólares para los consumidores- prometen nuevas oscilaciones inflacionistas. Según ha confirmado el mismo Powell en su ponencia posterior a la reunión, no cierran la puerta a ralentizar la flexibilización del crédito en caso de que «la economía se mantenga sólida y la inflación se aleje del objetivo del 2%». Con todo, no ha querido identificar una ratio de equilibrio -el punto en el cual el Banco Central considera que se ha logrado doblegar la inflación definitivamente-. «Solo estamos comenzando a pensar en ello», asegura.

Una relación conflictiva
La relación entre Trump y Powell, desde el primer mandato del líder republicano, ha sido complicada. A pesar de que lo nombró él mismo en 2018, el perfil técnico del presidente de la Fed se ha interpuesto entre ambos, ya que el banquero central ignoró las demandas del comandante en jefe de reducir los tipos de interés durante su estancia en la Casa Blanca. De hecho, endureció las condiciones de crédito en varias ocasiones, hasta el 2,5% que alcanzaron a finales de 2018. «Ha tomado muchas decisiones malas», decía Trump, aún desde el Despacho Oval. Recientemente, sin embargo, ha asegurado que mantendrá al presidente de la Reserva en su lugar «a condición de que lo haga bien».
A pesar del impacto provocado por Trump, Powell ha negado «efectos a corto plazo» de las proyecciones en política económica de la nueva administración. «No sabemos qué hará el presidente, por tanto, no sabemos qué efectos tendrá sobre la economía», ha respondido el presidente de la Reserva. Así, sentencia, «las estimaciones se tendrán en cuenta, junto a incontables otros factores». Sin embargo, consultado por las previsiones para 2025 que hizo en septiembre -cuando dibujaba un año con cuatro bajadas de 25 puntos básicos, hasta retroceder el costo del crédito un punto porcentual completo-, el dirigente ha evitado confirmar la lectura. «Estamos en el camino de normalización, pero tenemos varias semanas de datos por estudiar antes de tomar la próxima decisión», ha declarado.