El Eurostat ha confirmado que la inflación a la eurozona bajó un punto y medio durante el mes de marzo y se situó en el 6,9%. Estas cifras se comparan con la variación registrada el febrero, que finalizó en el 8,5%. Según el comunicado de este miércoles, la tasa interanual acumula cinco meses consecutivos a la baja, una tendencia impulsada sobre todo por la caída de los precios de la energía (-0,9%). El estado español es uno de los países donde la inflación bajó más, hasta el 3,1%. A pesar de que cada vez se ve más lejos el récord de inflación al cual llegó Europa el octubre pasado, con un 10,7%, todavía se mantiene por encima del objetivo del Banco Central Europeo, que se sitúa en el 2%.
En términos intermensuales -incremento de precios de febrero a marzo-, la inflación en la eurozona se situó en el 0,9%. Los sectores que más contribuyeron al alza de precios fueron la industria (+2,3%) y el de los alimentos no procesados (+1,9%), mientras que la energía fue el único donde el importe de los productos se redujo (-2,2%). Por países, Luxemburgo y España registraron las tasas de inflación interanual más bajas de la eurozona, del 2,9% y el 3,1%, respectivamente, mientras que las más elevadas se dieron a Hungría (+25,6%), Letonia (+17,2%) y la República Checa (+16,5%).
Los alimentos continúan marcando el alza de la inflación
Una de las principales razones del alta inflación es el hecho que los precios continúen elevados. De hecho, esto es a causa del encarecimiento de los alimentos, el alcohol y el tabaco, unos productos que en marzo se encarecieron un 15,5% en términos interanuales, cinco décimas más que en febrero. En cuanto a los productos industriales, los precios durante el mes de marzo se incrementaron un 6,6% respecto al mismo periodo del año pasado, mientras que al sector servicios la subida fue del 5,1%. Donde sí que se continúan registrando récords es en la inflación subyacente, que es la que no tiene en cuenta la energía y los alimentos no procesados. En marzo, esta tasa se elevó una décima en comparación con febrero, hasta el 7,5%, cifra que supone un nuevo récord histórico a la eurozona.