El crédito medio se ha disparado un 37% en el Estado español en los últimos doce meses. Así lo confirma un estudio del proveedor de préstamos Younited, que asegura que el montante mediano de los préstamos al por menor al mercado español ha experimentado un incremento de más de 2.800 euros en términos interanuales, hasta los 10.453 euros. De este modo, durante el mes de abril, el crédito al consumo constata una mejora sustancial todo y la endurecimiento de política económica impulsado por el BCE con el objetivo de «enfriar la economía» encareciendo el dinero.
La volatilidad macroeconómica, aseguran desde el proveedor de crédito, «no ha frenado» la entrada al mercado de los consumidores del Estado. Una de los destinos más comunes para los créditos durante el periodo estudiado es la reforma de la vivienda, un sector en que los préstamos se han levantado hasta los 11.093 euros de media, un 35% más que un año antes, cuando se quedaron poco por encima de los 8.200 euros.
El automóvil pide financiación
Por otra banda, ciertos productos han visto la demanda de financiación crecer sustancialmente por las subidas de precio que han acumulado desde el inicio de la guerra en Ucrania. Según el estudio de Younited, «el automóvil se ha encarecido visiblemente durante los últimos 14 meses»; el que ha elevado el flujo de financiación dedicada al sector en un 22,46%, hasta los 15.464 euros de media. Si se traslada el foco a los vehículos de segunda mano, el alza interanual ha estado todavía más pronunciada. En concreto, los créditos para este mercado han llegado hasta los 8.935 euros de media, un 36,14% más año a año.
Busca de liquidez
Si bien la mala situación macroeconómica no ha afectado necesariamente el consumo de los hogares –y la demanda de crédito que se asocia– los demandantes de financiación han accedido a él en la busca de una mejor salud financiera. Según el estudio de Younited, uno de cada tres préstamos pedidos durante el 2022 correspondían a una mejora de la solvencia. Del total, un 19,54% se dedican a la reunificación de deuda, mientras que cerca de un 15,9% iban dirigidos a la liquidez. La tendencia, explican desde la empresa «se mantiene y aumenta considerablemente durante el inicio del 2023»: cuatro de cada 10 préstamos van destinados a operaciones de solvencia económica, con crecimientos superiores a dos puntos en ambas tipologías.