El sector del automóvil tiene poco a celebrar durante el segundo mes del año. Según los datos publicados por la patronal española Anfac, la producción de vehículos a cierre de febrero se ha estancado en términos interanuales, con una escalada prácticamente inexistente, del 0,7%. Las cifras de la asociación sectorial apuntan a poco menos de 228.000 coches salidos de las fábricas españolas durante el periodo estudiado, hecho que ha retardado el conjunto del mercado. En paralelo al frenazo productivo, la industria automovilística del Estado ha registrado un retroceso de siete décimas en sus exportaciones, con menos de 205.000 ventas al exterior.
Justo es decir que la tendencia acumulada del año no es tan negativa si se atienen los datos de los primeros dos meses del año. Un enero especialmente activo ha facilitado que la bajada de febrero haga menos mal a un sector que ha producido en las primeras ocho semanas del año cerca de 459.000 vehículos, un 9% más que en el mismo periodo del año anterior. Con los efectos de las crisis de cadenas de suministro ya atrás, las empresas automovilísticas han conseguido sostenerse incluso en un inicio del 2024 de frialdad económica y de consumo. Hay que recordar que el del coche es un mercado que puede tomar mal por los entornos de tipos de interés elevados, por el rol que el crédito toma en este tipo de compras.

Tensión entre los eléctricos
La penetración del vehículo alternativo había sido una de las grandes tendencias productivas del sector del automóvil durante los últimos años. Según los datos de Anfac, el febrero no ha seguido esta línea –o, como mínimo, no en el conjunto de la industria– . Los vehículos de cero y bajas emisiones han registrado un aumento de producción del 5,7% año a año; si bien la expansión va por barrios. Los electrificados –eléctricos puros y híbridos enchufables– caen un 24% en el ámbito fabril, hasta los 23.237; mientras que los híbridos escalan un 62,2% y superan las 18.600 unidades, un 8,2% del total de la producción en el Estado.
«O aceleramos, o nos descolgamos»
Desde la patronal lamentan la tendencia del vehículo eléctrico durante las primeras semanas del año. El director general de Anfac, José Luís López-Tafall, lamenta que el público todavía no los contempla como una opción de compra sólida. «Sin demanda no hay producción –razona el directivo–; por lo tanto, hay que incentivar esta demanda y establecer políticas que estimulen el mercado». En este sentido, el mismo López-Tafall alerta de los importantes riesgos que la industria española enfrenta si no entoma la transición a los motores eléctricos. «O aceleramos el ritmo o nos descolgaremos de la carrera de la electrificación», avisa, sentenciando que «ni la economía, ni la ocupación ni la industria se lo pueden permitir». Sobre el conjunto del mercado, el directivo ha sacado hierro al estancamiento, que atribuye a «la normalización de los ritmos de producción y su adaptación a los imprevistos».