Después de meses y meses sin cesar de subir, el Euríbor ha logrado el 4% en su tasa diaria. Esta nueva subida llega 24 horas después de que el Banco Central Europeo (BCE) anunciara una nueva subida de los tipos de interés en 25 puntos básicos, que llevaba la tasa de referencia al 4%. Concretamente, el Euríbor se ha situado en el 4,020%, lo cual representa su máximo nivel desde el 25 de noviembre de 2008, cuando se colocó en el 4,051%. De este modo, la tasa mediana mensual ya es del 3,928%.
Hay que recordar que la subida del euríbor ha sido sostenida desde hace justo un año y se traduce en otra subida para todos aquellos que tengan que revisar la cuota de su hipoteca en las próximas semanas. Todo y este nuevo aumento de las cuotas, como el Euríbor ya empezó hace subir hace un año, el efecto base provocará que el encarecimiento no sea tan pronunciado como el pasado mes de mayo. Si tomamos los últimos datos disponibles del INE, aquellos que tengan préstamo mediano -unos 145.510 euros a 24 años– verán como su cuota hipotecaria sube unos 220 euros mensuales aproximadamente.
Los tipos no se bajarán cuando se llegue en su punto de equilibrio
Ahora bien, a pesar de que se ha atravesado el dato más alto desde el 2008, todo hace indicar que el camino del Euríbor seguramente no se acabará aquí, puesto que la presidenta del BCE, Christine Lagarde, ya aseguró que las subidas de tipos todavía no han acabado. Concretamente, Lagarde aseguró que «todavía no hemos llegado al destino, tenemos camino para hacer», asegurando que “volverán a subir los tipos de interés en julio si no hay un cambio material” inesperado en la estructura de costes de la UE.
Además, una vez se llegue a este punto de equilibrio, los tipos no se bajarán y así lo aseguró Lagarde. “No contemplamos, por ahora, una parada”, aseguró la economista francesa y, incluso, fue más allá añadiendo que su idea “no solo es llegar al objetivo del 2%, sino mantenerse a medio plazo”. Esta posición implica una importante estabilidad de la situación de tipos altos a largo plazo.
A la vez, las previsiones del BCE, en cuanto al retroceso de la inflación, Lagarde aseguró que “no satisface” a los gobernadores de la política monetaria. “Por eso podemos garantizar que continuaremos subiendo los tipos”, negando de nuevo que haya un punto de equilibrio final definitivo sentenció Lagarde, que culminó volviendo a asegurar que se sabrá cuando se llegue en su punto de equilibrio quien se llegue, puesto que «no es el que mueve nuestras decisiones».