El presidente del Bundesbank, Joachim Nagel, ha defendido que el Banco Central Europeo tendría que continuar subiendo los tipos de interés. El gobernador de la autoridad financiera federal asegura que la inflación es «demasiado elevada» porque los 375 puntos básicos actuales sean «suficientes» para controlar la crisis de precios. En una reciente entrevista con el diario
En la línea de los gobernadores más duros del BCE, así, Nagel alerta que «el nivel actual de tipo todavía no es suficiente para garantizar precios estables». Si bien se muestra «satisfecho» con los 25 puntos básicos anunciados por Christine Lagarde la pasada semana, ha reconocido que «se podía imaginar» un aumento del 0,5% –del cual se había mostrado partidario durante los días anteriores a la reunión de política monetaria–. «La batalla contra la inflación todavía no se ha ganado», reitera.
El encarecimiento no se para
Ante la posible disyuntiva entre ralentización económica excesiva y control de precios, el banquero alemán se ha posicionado claramente a favor de intensificar las herramientas de control de la inflación. El BCE, asegura Nagel, «no se tiene que parar» aunque se empiece a notar el efecto del endurecimiento monetario sobre los precios –una clara necesidad para «romper la inflación»–. A pesar de que el presidente sostiene la necesidad de acelerar la subida de tipo, considera que el margen de encarecimiento del crédito «no es tan crucial como lo era» durante el 2022, cuando se partía de un escenario de tipo cero.

Una vez lograda el punto de equilibrio, además, Nagel se ha alineado con el FMI en la reclamación de alargar la estancia de la Eurozona en los tipos de interés elevados. Talmente como reclamó la institución dirigida por Kristalina Georgieva, «una vez se haya logrado el nivel suficiente para combatir la inflación, tendremos que permanecer un tiempo», subraya.
Reducción del balance
Más allá de las subidas de tipos de interés, Nagel ha alabado el anuncio por parte del BCE de reducir con más velocidad su cartera de activos –después del frenazo absoluto de la compra de cara a los estados miembros–. El presidente del Bundesbank considera «de particular importancia» el fin del asset purchase programme y la reducción de 15.000 millones de euros en el balance negativo de la entidad. Así, el banquero celebra la decisión en conjunto de la última reunión de política monetaria del ente monetario continental.