En plena OPA hostil del BBVA sobre el Banco Sabadell, la entidad que preside Josep Oliu, y en medio de la «preocupación» que hay al gobierno español por esta operación, el banco vasco ha restado valor a la retribución de 2.900 millones de euros los dos años próximos que tiene previsto abonar Banco Sabadell. La responsable global de Estrategia y M&A de BBVA, Victoria del Castillo, defiende que esto no supone una creación de valor para los accionistas, sino que es una cosa neutra para ellos. «El anuncio de un pago de dividendos a corto plazo no genera más valor para el accionista, simplemente supone distribuir una cosa que ya pertenece«, ha asegurado en una entrevista con el diario
«El que de verdad importa es la capacidad de generación de beneficio de ahora en adelante, que determinará la capacidad de pago de dividendos a futuro, de manera sostenible», ha indicado la responsable de Estrategia del banco. Así, Del Castillo defiende que la operación de fusión planteada por BBVA provocará un aumento del 30% del beneficio por acción para los accionistas de Sabadell. Y a esto se sumarán los ahorros de 850 millones de euros en el año en sinergias. «Y un beneficio más grande sí que comportará, de forma sostenible, un dividendo más grande. Eso sí que es creación de valor», ha recalcado.
El compromiso de Banco Sabadell para este año y el siguiente es remunerar los accionistas con 2.900 millones de euros. Sin embargo, esta cifra podría llegar a ser superior porque cuando el banco presidido por Oliu hizo este compromiso no se recogía la mejora en el objetivo de retorno sobre capital (RoE), que ha pasado a ser de un 13%, ante el 12% anterior.

El Sabadell abrió la puerta a repartir dividendos extraordinarios
De hecho, el pasado mes de julio, en una entrevista con Europa Press, el consejero delegado de Banco Sabadell, César González-Bien, abrió la puerta a repartir dividendos extraordinarios para repartir el exceso de capital que genera el banco. «Repartiremos el que esté por encima del 13% del capital básico del banco si lo aprueba la junta. No hay una limitación. No hay esta restricción que el máximo que podemos repartir es el 60% de los beneficios del año», ha explicado consejero delegado.
El nuevo objetivo de reparto de remuneración se fijó el julio de este año y supuso elevar en 500 millones de euros el reparto de 2.400 millones que había hecho deslizar el mayo, como argumento para rechazar la OPA de BBVA. Sabadell explicó que este reparto de 500 millones adicional se debía a un impacto menor de Basilea IV y al reparto del programa de recompra que quedó suspendido por la OPA.