La fortaleza de las pequeñas y medias emprendidas de Cataluña, así como su predisposición a competir en productividad se han convertido en objetivos clave para la administración pública. En este sentido, y para dotar de las ayudas necesarias al tejido productivo catalán, el consejero de Emprendida y Trabajo, Miquel Sàmper, y el presidente de Pimec, Antoni Cañete, han oficializado el pistoletazo de salida del proyecto
Tal como ha explicado el Govern y la patronal de las pequeñas y medianas empresas se trata de un proyecto 100% subvencionado que consiste en la elaboración de una diagnosis y un acompañamiento personalizado a través de tres fases: Diagnosticar, de forma clara a corto y medio plazo, la competitividad de la empresa con indicadores predictivos de los ámbitos económico, financiero, laboral, estratégico y estructural. Con estas herramientas -que se prestarán a las empresas de manera digital- se podrá emitir un informe personalizado y acceso a formación en materia de digitalización, marketing y ventas, internacionalización, operaciones, habilidades directivas y finanzas corporativas.
Además, también se pondrá al alcance de las compañías una serie de recomendaciones y puntos de mejora a la competitividad. Cañete ha señalado en la presentación del proyecto que lse emprendidas de menor dimensión son más susceptibles a los efectos de los cambios normativos, a las nuevas exigencias de los clientes y de los proveedores y a los requisitos constantes del mercado de trabajo en general. Por lo tanto, ha reflexionado sobre el concepto de competitividad y ha recordado que es «fundamental para garantizar el buen funcionamiento de la economía».

Una hoja de ruta para la mejora de las empresas
El Govern y Pimec esperan que este pacto ayude las empresas catalanas a crecer y subsistir en un mundo globalizado y competitivo como es el actual. Es por eso que todas las herramientas que pondrán al servicio de las compañías buscarán hacer capaz en el empresario de llevar a cabo un análisis y reflexión y una identificación clara de los factores claves de cambio para asegurar la competitividad de su empresa. Aparte, también se espera que con el apoyo adecuado, estas empresas puedan definir un plan de competitividad, que tal como ha anunciado la administración y la patronal, consiste a estructurar una hoja de ruta por la competitividad de la empresa, donde se definan las acciones necesarias a llevar a cabo para el logro de los objetivos establecidos.