Puig ha anunciado la compra de una “participación mayoritaria” de la compañía de cosmética molecular Dr. Barbara Sturm, la fundadora de la cual mantendrá una pequeña cantidad de acciones de la empresa que puso en marcha en 2014. El gigante catalán de la perfumería refuerza así su posición competitiva en el sector del cuidado de la piel con una marca “reconocida a escala mundial” que ha desarrollado canales digitales de venta y una red internacional de balnearios y
Con la incorporación de la firma alemana, Puig consolida su cartera de marcas de belleza prémium y le permitirá impulsar la expansión internacional de su negocio con establecimientos en Düsseldorf (Alemania), Londres (Reino Unido), Nueva York (EE. UU.), Miami (EE. UU.), Los Angeles (EE. UU.), Dallas (EE. UU.), Yakarta (Indonesia) y Singapur. El presidente ejecutivo de la multinacional catalana, Marc Puig, ha destacado que la empresa alemana se caracteriza por dar un “enfoque científico al cuidado de la piel y sus tratamientos de alta eficacia”.
Tratamientos de calidad con base científica
La doctora alemana Barbara Sturm ha explicado que fundó la empresa para ofrecer tratamientos excepcionales con una base científica y ha celebrado el acuerdo con Puig, con quien comparte el espíritu emprendedor y un compromiso firme con la innovación, la calidad del producto y el conocimiento. “Estamos preparados para presentar nuestros productos para el cuidado de la piel a un público más amplio”. Cabe de los productos de la compañía tiene fragancias sintéticas ni conservantes agresivos o parabenos, se testan en ensayos sin crueldad animal y son “adecuados para todo tipo de pieles y necesidades”.
Sturm fue pionera en el uso de tratamiento antiinflamatorio con antecedentes en investigación ortopédica y en 2002 se especializó en el sector de la estética. Creó un tratamiento MCF, un facial de plasma rico en plaquetas, y la MC1, una crema hidratante a medida basada plasma que aprovecha el poder de las proteínas del propio cuerpo para facilitar la regeneración cutánea.
