Las Naciones Unidas actualizan su lista negra de empresas con negocios en los asentamientos israelíes ilegales en Cisjordania con 158 nuevas incorporaciones. Entre ellas, destacan cuatro empresas del Estado español: la constructora de Florentino Pérez, ACS; la pública Ineco, la fabricante vasca de ferrocarriles CAF y la Sociedad Española de Montajes Industriales (SEMI). La oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos de la ONU acusa a las 158 compañías que figuran en el listado de «suministrar equipamiento o materiales que facilitan la construcción y el mantenimiento de los asentamientos, las demoliciones de domicilios o propiedades palestinas, así como las actividades de vigilancia, el uso de recursos naturales para fines comerciales o la contaminación de aldeas palestinas».
Las empresas del Estado señaladas por Naciones Unidas han intentado desvincularse de la acusación. ACS ha sido la más veloz: la firma del presidente del Real Madrid alerta, en declaraciones a la agencia Europa Press, que no tiene «ningún contrato ni actividad» en la región, y atribuye su inclusión a antiguas filiales vendidas hace años a la francesa Vinci. Una de estas filiales es, de hecho, la SEMI, que figura en el listado exactamente por los mismos motivos que ACS: «el uso de recursos naturales, principalmente agua y suelo, para su negocio» en el territorio ocupado ilegalmente. Cabe decir que la actividad de filiales es suficiente para aparecer en la lista negra del Alto Comisionado; si bien la multinacional española alega que todas las empresas que hacen negocio en el Bloque Occidental ocupado ya no están vinculadas. Por su parte, la pública Ineco defiende que solo tiene negocios en «zonas reconocidas legalmente como israelíes».

Salidas notorias
La lista negra de colaboradores con el expansionismo israelí se ha actualizado este viernes por primera vez en más de dos años. En este período, muchas compañías han podido constatar su salida de Cisjordania. Algunas, con actividad relevante en Cataluña: es el caso de Alstom, también especializada en la fabricación de ferrocarriles, y que cuenta con una planta productiva importante en Santa Perpètua de Mogoda. La francesa se encontraba en pleno conflicto con el Ayuntamiento de Barcelona precisamente por formar parte de esta lista: el gobierno de Jaume Collboni, en aplicación de la ley, bloqueaba la participación de la empresa en la licitación para los nuevos convoyes del metro de la ciudad. Ahora, sin la losa de la ONU, la empresa podría volver a operar con normalidad. Como en el caso de ACS, la inclusión de Alstom en el listado respondía a la actividad de una filial, Bombardier, que había participado en la construcción de un tranvía en el Bloque Occidental.
También ha quedado fuera del listado la aerolínea eDreams Odigeo, incluida por promocionar alojamientos turísticos ilegales en la región ocupada, y que anunció que los eliminaría de su plataforma. Permanecen, sin embargo, otras empresas del sector turístico, como TripAdvisor, Booking o Airbnb.