Indra prevé facturar 6.000 millones de euros de cara al 2026 y llegar hasta los 10.000 millones de cara al 2030, es decir, duplicar la facturación en comparación a los ingresos del último ejercicio. Así lo ha hecho saber la compañía de consultoría este miércoles por la mañana en un documento emitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), en el cual ha informado sobre el plan estratégico que seguirán en los próximos seis años. Para llevar a cabo este incremento significativo de la facturación, Indra prevé reestructurar las áreas de actuación, actualmente compuestas por el departamento de defensa, gestión del tráfico aéreo (ATM), movilidad y Minsait, la filial tecnológica de la multinacional.
Con la reestructuración, la empresa catalana fusionará el departamento de movilidad dentro de la vertiente tecnológica e incorporará «nuevos negocios industriales», a pesar de que, a estas alturas, todavía está para definir cuáles serán los puntos de actuación. Así pues, teniendo en cuenta que prevén incluir nuevos marcos de acción dentro de Minsait, la compañía considera que es necesario incluir nuevos socios a esta rama para dotarla de mayor autonomía. Las modificaciones estratégicas del esqueleto empresarial también plantean crear una filial dedicada exclusivamente a trabajar al sector espacial.

Poner en marcha nuevas ramas de la compañía
A pesar de que a estas alturas la creación de la filial se limita al papel, la compañía confía a poder poner en marcha la nueva rama de la compañía dedicada al espacio en los próximos dos años, es decir, a tenerla terminada de cara al 2026, y que su volumen de facturación escale hasta los 1.000 millones de euros, aproximadamente, antes del cambio de década. Más allá de los ingresos, la compañía también prevé conseguir un margen operativo del 12% a dos años vista e incrementarlo hasta el 14% el 2030.