Eines de País Terrassa, la candidatura independentista a las elecciones de la tercera Cámara de Comercio de Cataluña, critica la «falta de cultura democrática» entre los organismos que fiscalizan y regulan los comicios a la corporación. Después de haber denunciado en varias ocasiones el uso politizado de los logos de la Cámara de Terrassa por parte de la candidatura
Desde la lista cívica recuerdan que ya a principios de agosto la Junta Electoral de Zona confirmó que el uso del logo de Cambra en las publicaciones electorales iba contra la normativa, en cuanto que este «queda reservado a las comunicaciones oficiales» de la corporación. Los candidatos de la lista cívica detectaron el uso del símbolo cameral a las comunicaciones de la empresa Hormiconsa, que opta al primer epígrafe; así como en la web corporativa de la candidatura, que atribuyen al mismo presidente Ramón Talamàs. Como reconocen desde Eines, la candidatura continuista no retiró los símbolos en cuestión hasta días después, entre el 6 y el 8 de agosto.
Como recuerda el candidato Antoni Soriano, Eines reclamó a la Junta Electoral que tomara medidas contra este uso politizado del logotipo de Cambra. Según Soriano, la inclusión de símbolos oficiales de la corporación a una de las candidaturas crea un campo de batalla electoral desequilibrado. «Ha habido unos señores que han sacado ventaja por el mal uso de unas herramientas, y esto tiene que tener un castigo», asevera el miembro de la lista cívica. Si bien el candidato contemplaba la obligación de emitir un comunicado reconociendo el mal uso del grafismo, desde el espacio encabezado por Natàlia Cugueró han llegado a pedir la recusación de los dos candidatos –una medida para la cual la Junta Electoral se declaró, también a principios de agosto, incompetente–. A la consulta de los candidatos sobre qué organismo sería competente para explorar esta vía, la Junta todavía no se ha pronunciado.
Sin respuesta
Tal como lamenta el candidato, ni la Junta Electoral ni el resto de organismos con que Eines se ha puesto en contacto han ofrecido respuesta sobre cuál es el organismo competente donde dirigir las quejas. Soriano atribuye este bloqueo a la «carencia de cultura democrática» en una Cambra de Terrassa que acumula más de 130 años de continuismo. «Se están encontrando con una situación que no se había producido nunca: unas elecciones con dos grupos diferenciados, con 35 epígrafes, y ambas con un liderazgo presidenciable», subraya. «No saben qué hacer con situaciones no previstas».
El mismo Soriano reconoce la dificultad de recusar un candidato en estas condiciones a poco menos de un mes de las elecciones; si bien reitera la necesidad de una rectificación. «Era relativamente fácil pedir una carta pública; la rectificación se tenía que haber hecho», continúa el miembro de Eines. El uso del distintivo oficial, insiste, genera una «ventaja» para los candidatos que lo han usado, y los electores que han recibido o viste las comunicaciones con el logotipo antes de su retirada no tendrán ningún tipo de corrección que contradiga el mensaje inicial de
La vía judicial, «siempre abierta»
Si bien la reacción de los organismos reguladores del proceso electoral todavía no ha llegado –y desde Herramientas reconocen que «ahora ya poco hay a hacer»–, los candidatos independentistas no se están de explorar otras vías para resolver el conflicto. El miembro de la lista Jordi Roset ya afirmó a