Los mercados de inversión han recibido con los brazos abiertos los resultados trimestrales del Banco Sabadell en medio de la última etapa de la OPA hostil que lanzó el BBVA hace un año. El banco catalán ha cerrado la jornada en el parquet madrileño con un incremento de la cotización del 3,64%, hasta los 2,65 euros por acción. Los movimientos de este jueves invierten las caídas que provocó el dictamen de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, visto como favorable a los intereses del opante. Desde el pasado miércoles, cuando la CNMC hizo pública su decisión, los títulos vallesanos habían llegado a perder cerca de un 6% de su valor. El balance de los primeros tres meses del curso, que ha dejado un beneficio de 498 millones de euros en las arcas sabadellenses, ha terminado de entusiasmar a los inversores, que ya comenzaron a apostar por el Sabadell con el anuncio de la consulta pública en fase 3 del pasado lunes.
El Sabadell, cabe decir, ha escalado este jueves sobre una ola de buen rendimiento del sector bancario. Ha sido el mejor de los cuatro grandes del Ibex, de hecho, por solo unas décimas: el Banco de Santander ha ganado más de un 3,3% durante el día, hasta los 6,56 euros por acción. CaixaBank, por su parte, ha escalado tímidamente, un 1,8%. El espejo de los catalanes, sin embargo, es BBVA, que ha ganado fuerza, pero menos que sus rivales. Según los datos de la Bolsa de Madrid, los títulos de la entidad con sede en Vizcaya valen 12,8 euros, un 2,03% más que en la sesión anterior. Se trata de la segunda jornada consecutiva que las acciones del Sabadell ponen distancia de por medio de la oferta de BBVA, con un crecimiento superior al del banco opante, después de cuatro días consecutivos favorables al Banco de Bilbao.

En línea con las expectativas
El buen rendimiento del Sabadell tras los resultados va en la misma línea que la mayoría de voces empresariales del país, ampliamente alineadas con el proyecto que preside Josep Oliu. Un directivo financiero comentaba entre pasillos de la Reunión del Círculo de Economía que no temía por las alzas del BBVA. «Unos han presentado resultados y los otros no, unos tienen la CNMC y los otros no. Yo esperaría a las cuentas», expresaba. Fuentes del accionariado del banco catalán aseguraban también que el cambio de ritmo era temporal. «La prima es negativa, y no cambiará a largo plazo», defendían. Incluso el consejero delegado, César González-Bueno, atribuía este mismo jueves el cambio de tendencia a movimientos intradía. «En el diario se puede ver cómo la prima fluctúa; pero a un año, el BBVA ha crecido un 23% y el Sabadell, un 60%», argumentaba González-Bueno, quien considera que la valoración de su banco responde a criterios de evaluación estructurales, y no a las inercias de la OPA.
Infravalorado en 692 millones
Con este nuevo desequilibrio en el avance de las acciones vallesanas, la prima negativa -el monto por el cual la oferta de intercambio del BBVA infravalora al Sabadell a precios actuales- vuelve a subir por encima del 5%. Cabe recordar que el banco opante ofrece una acción propia y 70 céntimos a cambio de 5,3456 acciones del opado. Con esta fórmula, a los niveles actuales, el intercambio planteado por BBVA infravalora al Sabadell en unos 692 millones de euros. La brecha va oscilando, y está lejos de los máximos que alcanzó la semana pasada: durante el Día del Trabajador, la distancia entre el valor que otorgaba el mercado al Sabadell y la que reflejaba la OPA era de más de 950 millones de euros, una ratio en rojo del 6,9%. La distancia es suficientemente amplia para que el CEO del Sabadell haya constatado este mismo jueves que pocos inversores accederán. «Descarriló hace tiempo, y continúa descarrilada», razonaba.