El consejero delegado del Banco Sabadell, César González-Bueno, ha separado la posible venta de la filial británica, TSB, de la OPA hostil que el BBVA sostiene sobre la compañía. En su intervención en el ciclo de seminarios de la APIE, en Santander, González-Bueno ha sentenciado que cualquier operación por TSB se resolverá con «total independencia» respecto a la oferta del Banco de Bilbao. No ha querido asegurar, sin embargo, que esta se termine concretando; y ha vinculado cualquier acuerdo a unas condiciones que «creen valor para los accionistas» de la entidad vallesana. «Es posible que hagamos la operación, y es perfectamente posible que no la hagamos; pero no tendrá nada que ver con la OPA», ha subrayado. El CEO intenta así desmentir que la salida de las Islas sea un último intento por asegurar el apoyo de los minoritarios catalanes con un dividendo extraordinario.
Las intenciones del Sabadell, así como las posibles ofertas más atractivas, se darán a conocer antes del próximo 24 de julio, cuando la directiva vallesana presentará en sociedad su plan estratégico para el trienio 2025-2027; así como los resultados del segundo trimestre del curso. Consultado por este medio, el accionariado asegura que espera un plan de ruta «que haga lo mismo que ya hace bien el Sabadell, pero lo haga mejor». Es decir, una estrategia para continuar fundamentando el liderazgo en el segmento de pymes y una optimización de la rentabilidad de la banca comercial. El documento estratégico, cabe recordar, se debería haber presentado en 2024, cuando caducó el anterior -el primero de González-Bueno como primer ejecutivo-. La OPA, sin embargo, lo frenó. Ahora, tanto el CEO como el presidente, Josep Oliu, buscan utilizar las previsiones para los próximos ejercicios como una herramienta para acercar a los inversores del Sabadell a su trinchera.

La OPA, «posibilidades reducidas»
Más allá de la operación TSB, el directivo ha celebrado el dictamen emitido por la Moncloa tras la fase 3 de estudio del expediente, culminada el pasado martes. Para González-Bueno, la nueva condición del Consejo de Ministros, que prohíbe la fusión durante entre tres y cinco años, «reduce las probabilidades» de que la OPA siga adelante. El bloqueo a la absorción del Sabadell «cambia totalmente las circunstancias» de la compra, y fuerza al banco opante a replantearse su estrategia. «Como muy bien ha dicho el BBVA, tendrá que considerar si con estas nuevas condiciones le compensa seguir adelante», ha analizado el consejero delegado -en referencia a las declaraciones del country manager español del Banco de Bilbao, Peio Belausteguigoitia, que ha abierto la puerta a retirar la ofensiva, pero también a denunciar al gobierno español ante el Tribunal Supremo-.