El Banco Sabadell gana 489 millones de euros en el primer trimestre, un 58,6% más que un año antes. La entidad catalana enfrenta la recta final de la OPA hostil del BBVA con el mejor crecimiento interanual de toda la banca cotizada, muy por encima tanto del opante como del resto del sector. Como ha sido el caso del resto de bancos del Ibex, el Sabadell ha notado el descenso del margen de intereses, con un 1,3% menos que hace un año; un descenso que ha equilibrado con un alza similar de las comisiones. Ahora bien, el incremento del resultado neto se explica en buena medida por la reducción de las provisiones por activos de riesgo y por la reforma del impuesto a la banca, que ya no se contabiliza totalmente el primer trimestre. Según ha detallado la entidad, el gravamen ha supuesto un gasto de 31 millones de euros entre enero y marzo -correspondiente solo al período en cuestión – lejos de los 192 millones que constaban en el balance del 2024 por la actividad de todo el curso.
El beneficio declarado durante los primeros tres meses del año ha elevado la rentabilidad hasta el 14,1% recurrente, si se tiene en cuenta el cambio de ritmo del pago del impuesto a la banca; y mejora la ratio de capital hasta el 13,31%, por encima del límite autoimpuesto del 13% y lejos del 9,6% que establece el regulador. El margen del banco catalán sobre el colchón económico que reclama el BCE es, así, más de 20 puntos básicos superior al del BBVA, que dejó el suyo en el 13,09% interanual tras el primer trimestre. El consejero delegado de la entidad, César González-Bueno, ha resaltado que las nuevas capacidades también hacen más dinámico el rendimiento que genera el banco para los accionistas. «Hemos generado más capital del que habíamos anunciado, y eso nos permite elevar de nuevo nuestra estimación de remuneración», ha declarado el directivo. Así, los inversores vallesanos recibirán un total de 3.400 millones de euros entre el 2024 y el 2025, añadiendo el dividendo a los programas de recompra de acciones. Cabe recordar que el Sabadell remunera directamente al accionista todo aquel capital superior al 13% CET1.

Cifras estables, pero menos riesgo
Según ha anunciado el banco, tanto los ingresos como los costos corrientes se han mantenido estables. De hecho, han dado un paso atrás bajo la presión de las caídas de tipos de interés: el margen de intereses ha retrocedido en un 1,3% interanual, hasta los 1.216 millones de euros. A cambio, el volumen más grande de operaciones ha elevado las comisiones netas hasta los 344 millones de euros, el mismo 1,3% año a año que pierden en la anterior partida. Con todo, el margen recurrente cae un 2,3%, hasta los 801 millones de euros. El balance final sale positivo, sin embargo, por la reducción del 29,2% de las provisiones totales, que se han erosionado con la mejora de perfil de riesgo. De hecho, el costo de riesgo del crédito frena en 22 puntos básicos, mientras que la compañía rebaja el costo de riesgo total en 16 puntos básicos. Se queda así en 35 puntos básicos, por debajo de las previsiones de la compañía.
La rebaja de los tipos de interés también se ha notado en un incremento importante del crédito vivo, hasta los 158.000 millones de euros, un 5% más año a año. El sector que más se expande es el hipotecario, con concesiones para compraventa de vivienda un 81% superiores que entre enero y marzo del 2024, unos 1.645 millones de euros. El crédito al consumo gana terreno también, hasta los 698 millones de euros, un 26% más en términos interanuales. El crédito a las pequeñas y medianas empresas, en el núcleo del negocio vallesano, se mantiene estable, con un incremento del 1% año a año, hasta los 4.510 millones. Finalmente, las terminales de pago generan unos 13.043 millones en balance, un 5% más; mientras que la facturación de tarjetas escala por encima de los 6.000 millones (+6%).