El Banco Sabadell distribuirá 370 millones de euros entre sus accionistas, lo que supone un dividendo de 0,07 euros por acción, a cuenta de los resultados del primer semestre de 2025. Esta cantidad equivale a un 37% de los beneficios obtenidos durante este período en la entidad bancaria.
Este pago ordinario se incluye en el plan de remuneración de los accionistas para el período de 2025-2027 que el banco presentó a finales de julio como una hoja de ruta para hacer frente a la ofensiva de la OPA que el BBVA quiere lanzar sobre la entidad catalana, para así poder tener a los accionistas de su lado.
En total, el Sabadell prevé distribuir hasta 6.300 millones de euros hasta 2027, una cifra que equivale a más del 40% de su capitalización bursátil actual. De estos, se estima que 1.300 millones de euros se distribuirán en 2025 mediante dividendos en efectivo y recompra de acciones.
Este pago también obligará al BBVA a ajustar nuevamente el precio que desea ofrecer en su OPA por el Sabadell. Con este movimiento de la entidad vallesana ya sería la tercera vez que el precio de la oferta debe adaptarse desde que se conocieron las intenciones del BBVA de lanzar la oferta de adquisición.
La oferta final se hará esperar hasta septiembre
A pesar de estos continuos ajustes en la oferta y la venta de la filial británica del Sabadell, el BBVA anunció en agosto que mantenía la OPA sobre la entidad catalana, quedando en manos de los accionistas catalanes.
Por otro lado, la oferta definitiva del BBVA no se conocerá hasta septiembre, alargando aún más el calendario de esta OPA hostil que comenzó en mayo de 2024. La dirección que comanda Carlos Torres consensuó esta decisión con la Comisión Nacional del Mercado de Valores para evitar la influencia del verano sobre la operación. El mes de agosto es “prácticamente inhábil” desde el punto de vista financiero. Así, abrir las puertas de la aceptación durante el mes central del verano eleva el riesgo de que los inversores catalanes no participen.