CriteriaCaixa ha aclarado en un comunicado este miércoles que la “posible” entrada en el accionariado de Celsa anunciada a principios de abril “se encuentra aún en fase de estudio”, y todavía “no se ha concretado nada al respecto”.
En el texto también se añade que “la operación se mantiene bajo análisis”, al igual que sucede con operaciones que se analizan en el curso de la actividad inversora habitual de CriteriaCaixa.
Este texto publicado este miércoles contrasta con lo que se hizo público por la compañía el 2 de abril, cuando se anunciaba un “principio de acuerdo” para incorporar a Celsa como un accionista “relevante”. Concretamente este acuerdo preveía la entrada del fondo inversor como «accionista relevante» de la multinacional siderúrgica con un 20% del capital y preveía cerrar la operación en pocas semanas.
De hecho, esta ampliación de la cartera industrial de CriteriaCaixa se veía como una culminación de la ampliación de capital de la siderúrgica vallesana, que hace tiempo que buscaba “un socio español” para consolidar su resurgimiento. Además, Celsa afirmaba que el pacto reafirmaba «la estrategia de reorganización financiera» de la compañía. Casi quince días después, Criteria informa que aún no hay suficiente información al respecto para finalizar la operación.
Más inversión industrial
La inversión en Celsa se alinea con los objetivos establecidos en el último plan estratégico de Criteria, mediante el cual la firma dirigida por Ángel Simón esperaba convertirse en el principal socio financiero del tejido industrial del Estado. Más allá de los activos estratégicos -como la energía o el agua-, el fondo busca elevar su cartera de capital privado hasta los 4.000 millones de euros en el año 2030, cuando culmine su guidance.
Celsa, por su parte, fundamenta su recuperación tras años convulsos bajo la mirada de los acreedores. La catalana tiene en propiedad 120 centros de trabajo, entre líneas de acero, plantas de reciclaje y otros nodos de la industria metalúrgica. Más allá de Criteria, la ampliación de capital de Celsa contará también con los accionistas actuales, que contribuirán al buen rendimiento de la compañía a corto plazo.
