El grupo de juego y ocio Cirsa ha contratado a tres grandes bancos de inversión internacionales para estudiar la suya salida a Bolsa en el estado. Según ha publicado Expansión este jueves, la empresa catalana habría fichado en Deutsche Bank, Barclays y Morgan Stanley para mirar si sería provechoso salir a bolsa. Concretamente, la compañía con sede en Terrassa plantea acceder al parqué mediante una oferta pública de venta de acciones (OPV) dirigida exclusivamente a inversores institucionales. Todo y este movimiento, pero, Cirsa no tiene «ni prisa ni necesidad» y han definido esta contratación como un paso más, mientras que han subrayado que la operación dependerá de las condiciones de mercado, las valoraciones de los bancos y la reacción de los inversores.
Según informa el mismo diario, la empresa propiedad de Blackstone está empezando los preparativos de una operación que podría llegar a estar valorada en más de 5.000 millones de euros. De hecho, la salida a bolsa, que no será inminente, es una manera porque la compañía norteamericana pueda desinvertir parcialmente a Cirsa y tendría que permitir reducir su apalancamiento financiero. Todo ello también acabaría permitiendo que la empresa fundada por Manuel Lao pueda afrontar un crecimiento en su negocio. A la vez, hay que recordar que ya hace años que se rumorea la posibilidad que la compañía salga a bolsa, aunque desde la compañía ya se avisaba que todavía no se daban las condiciones necesarias para hacerlo. De hecho, antes de que Blackstone comprara Cirsa a Lao por 2.000 millones en 2018, la empresa ya estuvo a punto de dar el paso al parqué en 1999 y 2017.
Actualmente, la compañía con sede en Terrassa cuenta con un total de 434 casinos en todo el mundo que integran 82.000 máquinas recreativas y unos 2.500 puntos de apuestas deportivas, que la convierten en una de líderes mundiales del sector. De hecho, cerraron el 2023 con unos ingresos de explotación totales de 1.991 millones de euros, un 17% más que el 2022, después de la normalización del negocio, que se vio muy afectado por la pandemia. Todo ello hizo que el ebitda de la empresa fuera de 630 millones de euros y se acumularan unos 80 millones de beneficios.