Celsa aprueba una nueva ampliación de capital para elaborar un nuevo «plan de creación de valor». Los fondos propietarios de la siderúrgica catalana han llevado adelante una iniciativa para generar 166 millones de euros a través de dos rondas de inversión que se dedicarán a inversiones centradas en la mejora de la competitividad del negocio, tal como han informado en un comunicado emitido este mismo lunes. La operación, tal como han anunciado, se ejecutará en dos fases. Una primera se llevará a cabo inmediatamente, y se dedicará a «inversiones y mejoras» en su operativa en el Estado, todo ello a través de Barna Steel S.A. Este primer movimiento supondrá una inyección de 81 millones de euros. El segundo paquete, de carácter más internacional, llegará más adelante. Las actuaciones vinculadas a este apartado, con un valor total de 85 millones de euros, se dedicarán a filiales fuera de las fronteras españolas; en concreto, en Noruega, Polonia y Gran Bretaña.
El objetivo de estos 166 millones es fundamentar un nuevo «plan de creación de valor» que afectará a una multitud de eslabones de la cadena de la empresa. Según recoge el comunicado, las nuevas inversiones se distribuirán en departamentos como «comercial, logística, compras, manufacturing o producción», entre otros. Para concretar el proyecto, la firma catalana ha contado con el apoyo de la consultora Bain & Company. La ampliación de capital, por tanto, complementará el «programa de inversiones ordinarias» de la empresa con el objetivo de «fortalecer su futuro» después de una intensa crisis por la relación entre la familia fundadora, los Rubiralta, y los fondos que finalmente se han hecho con la propiedad.

El nuevo control de Celsa
Con esta nueva inversión, Celsa encamina su recuperación bajo el control de los fondos que forman parte de su consejo de administración. La firma catalana está controlada por Golden Tree, Attestor, Strategic Value Partners, DWS y Cross Ocean, todo ello después de que los Rubiralta no pudieran asumir sus obligaciones de pago. Cabe recordar que en 2023 la siderúrgica alcanzó un beneficio de 469 millones de euros tras elevar cerca de un 28% la facturación, hasta los 2.055 millones de euros.