El consejo de administración de CaixaBank ha propuesto el nombramiento de cinco nuevos consejeros. Un movimiento con el que la entidad bancaria de origen catalán renueva su cúpula y pone fin a la era Bankia. Los nuevos nombres que formarán parte del consejo de la entidad, una vez se aprueben en la junta general de accionistas prevista para el 11 de abril, son Rosa María García Piñeiro, Luis Álvarez Satorre, Bernardo Sánchez Incera, Pablo Forero Calderón y José María Méndez Álvarez-Cedrón, según ha comunicado el banco a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Con esta renovación, el consejo deja fuera de la cúpula de la entidad a los miembros incorporados con la fusión bancaria tres meses después de la salida del expresidente José Ignacio Goirigolzarri, el cual, según la versión de la entidad, renunció voluntariamente a su cargo.
Concretamente, de las cuatro bajas anunciadas este jueves, hay tres que son de consejeros independientes antiguos miembros de Bankia y que entraron al consejo de administración de CaixaBank a raíz de la fusión del año 2021: Joaquín Ayuso García, Francisco Javier Campo García y Eva Castillo Sanz. A estos tres nombres se suma también el de José Serna Masiá, hasta el momento consejero dominical en representación de la Fundación ‘La Caixa’, que, siguiendo los pasos de Goirigolzarri, también ha renunciado al cargo. La nueva propuesta, pues, mantiene la estructura del consejo administrativo -con quince miembros, de los cuales el 60% son independientes-, pero sirve para cerrar la era Bankia.
La entidad de origen catalán, con este movimiento, elimina del consejo de administración todos los perfiles que permanecían del banco nacionalizado. El movimiento se añade a la sustitución de Goirigolzarri, que fuera presidente de Bankia en sus últimos momentos antes de la fusión, por Tomás Muniesa, un directivo de alta confianza del presidente de la fundación «La Caixa», Isidre Fainé. En un sentido similar se pueden leer algunos de los nombramientos anunciados este jueves; especialmente el de Méndez, director general de la patronal de las antiguas cajas, la CECA, que preside el mismo Fainé.
Así, la dirección confirma su intención de terminar de digerir la estructura del banco de las antiguas cajas. En un primer momento, el reparto de sillas en el consejo correspondió a la ecuación de intercambio que rigió la unión de ambas compañías, por la cual cerca de tres cuartas partes del capital correspondían a CaixaBank, y un 24% restante, a Bankia. Así, cuatro de los quince consejeros independientes correspondían a la entidad absorbida. Ahora, este periodo queda atrás, y la financiera de origen catalán vuelve a originar el conjunto de su estructura.
Los nombres que completan la dirección
El máximo órgano de dirección de Caixabank que completa Tomás Muniesa -el cual ha sustituido a Goirigolzarri como presidente-, el consejero delegado y ejecutivo Gonzalo Gortázar, y los independientes Eduardi Javier Sanchiz Irazu, María Verónica Fisas Vergés, Cristina Garamendia Mendizábal, Peter Löscher y María Amparo Moraleda Martínez. A través del mismo comunicado remitido a la CNMV, CaixaBank asegura que los nuevos nombramientos del consejo «contribuyen a continuar cumpliendo con las mejores prácticas en gobierno corporativo”.
