CaixaBank ha vuelto a aumentar su beneficio en los seis primeros meses del 2024. Concretamente, el banco ha registrado un beneficio neto atribuido de 2.675 millones de euros en el primer semestre, lo cual supone un incremento del 25,2% en comparación con el mismo periodo del año anterior y un nuevo récord en este periodo. Este aumento ha estado gracias a «una notable mejora de la actividad, con crecimiento en crédito y en recursos de clientes».
El consejero delegado de la entidad, Gonzalo Gortázar, ha afirmado que «en CaixaBank hemos tenido un primer semestre muy positivo en todas las líneas de negocio». Además, ha subrayado que “el incremento de la actividad ha sido una de las mejores noticias de los últimos seis meses: los recursos de clientes han aumentado en 37.095 millones y la cartera de crédito sano en 7.648 millones. Este crecimiento de casi 45.000 millones durante el semestre nos ha llevado a continuar mejorando nuestras cuotas de mercado y consolidar el liderazgo del sector”.
Crecimiento de los recursos de los clientes
En cuanto a los recursos de clientes, CaixaBank ha asegurado que cerraron el junio en 667.424 millones de euros, un 5,9% más que el diciembre del 2023, impactados por la estacionalidad habitual positiva del ahorro a la vista del segundo trimestre. Los recursos en balance aumentaron un 5,3% con alzas en ahorro a la vista, ahorro a plazo y en los pasivos por contratos de seguros; y los activos bajo gestión se sitúan en 172.589 millones, un 7,3% más.
En cuanto al crédito, la cartera de crédito sano se incrementó un 2,2% respecto de diciembre del 2023, hasta llegar a 351.700 millones de euros, con 7.648 millones de euros más, en un contexto en el cual la nueva producción avanza a muy buen ritmo. En el caso de las hipotecas, la cartera de crédito sano dejó de caer el segundo trimestre del ejercicio, principalmente a causa de la recuperación de la nueva producción durante el año, a pesar de que en el conjunto del primer semestre se mantuvo una caída del 0,4%.
De hecho, durante la primera mitad del año CaixaBank experimentó una buena evolución de la nueva producción en todos los segmentos. En el caso de los préstamos para adquisición de vivienda, la nueva producción crece un 42,8% respecto de los primeros seis meses del año pasado, con 6.648 millones de euros. Del total concedido en hipotecas, dos tercios correspondieron a préstamos a tipo fijo.
Aumento de todos los márgenes
Entre enero y el junio del 2024, la cuenta de resultados del banco muestra una clara mejora de la actividad «en uno en torno a dinamismo económico y de la estabilización de tipo de interés». Todo ello ha posibilitado un aumento de la rentabilidad sobre fondos propios (ROE), que se situó en el 14,4% al cierre de un semestre en que, además, la ratio de eficiencia creció hasta el 39%.
El margen de intereses, por su parte, aumentó un 20,5%, hasta situarse en 5.572 millones de euros el primer semestre. Los ingresos por gestión patrimonial (+12,7%) suben por el incremento de volúmenes y por la intensa actividad comercial, y los ingresos por seguros de protección también aumentan (+11,2%), mientras que las comisiones bancarias disminuyen un 4,9% durante la primera mitad del ejercicio, según ha anunciado el banco.
Por otro lado, el crecimiento del margen sucio creció un 15,4% (hasta los 7.701 millones de euros), que supone un aumento superior al de los gastos de administración y amortización recurrentes (+4,6%, con 3.028 millones), permite el crecimiento del margen de explotación un 23,8% (hasta los 4.673 millones).
Buena posición de liquidez
CaixaBank también ha destacado su «holgada posición de liquidez», con un incremento de los activos líquidos totales de 7.217 millones, hasta 167.421 millones, y un ‘Liquidity Coverage Ratio’ (LCR) del 218% a 30 de junio. Por su parte, la ratio Common Equity Tier 1 (CET1) se situó en el 12,2%, y el banco ha señalado que ha generado 101 puntos básicos de capital de manera orgánica. El saldo de dudosos cayó ligeramente, hasta los 10.466 millones, y la ratio de morosidad se situó en el 2,7%, mientras que los fondos para insolvencia permiten una ratio de cobertura del 70% y el coste de riesgo se mantuvo en el 0,29%.