MónEconomia
CaixaBank apela a la fusión con Bankia para permanecer en Valencia «indefinidamente»

El revuelo en el mundo empresarial que supuso el anuncio del Banc Sabadell de su regreso a Cataluña no parece haber movido la mano de CaixaBank. Su consejero delegado, Gonzalo Gortázar, ha reiterado durante la rueda de prensa de presentación de los resultados anuales de la entidad que no tienen ninguna intención de deshacer la salida de la sede social del país que llevaron a cabo en 2017, tras el referéndum de independencia del 1 de octubre de 2017. «Continuaremos en Valencia, y esto no responde solo a mi afirmación, sino a la voluntad del consejo», ha destacado Gortázar, insistiendo que la «vocación» de dejar allí la sede social «no tiene plazos». El directivo ha declinado comentar la decisión del banco que preside Josep Oliu.

Más allá de la situación política, Gortázar encuentra en la fusión con Bankia de 2021 un motivo para rechazar el regreso a Cataluña. «Bankia tenía no solo la sede en Valencia, sino también una presencia importantísima, como heredera de Bancaja», ha recordado el consejero delegado. Así, mantener la sede social en la Comunidad Valenciana responde a «un reconocimiento a las raíces que CaixaBank tiene en Valencia» y otros territorios del Estado. Así, CaixaBank reconoce la «cercana relación con Barcelona», donde también mantendrá una de sus sedes operativas a largo plazo y que acogerá la convención de directivos del próximo viernes. También, sin embargo, con Madrid -donde tienen la otra sede operativa, y que concentra la mayoría de las grandes exposiciones del banco, como la presentación de los planes estratégicos o parte de los resultados- y «otros territorios de España». Así, «esta decisión no parece en absoluto previsible que cambie». De hecho, preguntado por la reacción de los stakeholders del banco, el CEO ha resaltado la «absoluta normalidad» de las jornadas posteriores al regreso del Sabadell. «No ha pasado nada, no ha habido ruido en absoluto», sentencia.

Imagen de la sede corporativa de CaixaBank en Barcelona / CaixaBank
Imagen de la sede corporativa de CaixaBank en Barcelona / CaixaBank

La Cataluña «normal»

A pesar de la negativa a regresar al país, Gortázar ha celebrado que «las circunstancias de 2017 que llevaron a la aplicación del artículo 155 han mejorado» en el Principado, en un «proceso de normalización bueno para todos». Se trata del gran argumento del Gobierno socialista, así como de la patronal de las grandes empresas del país Foment del Treball, para acelerar el regreso de las sedes sociales que se marcharon hace siete años. Ahora bien, la «normalidad» con la que justificó el Sabadell el regreso al Vallés no fundamenta un paso atrás de CaixaBank, que sostiene que la permanencia en Valencia «va más allá del deterioro provocado en 2017». En este sentido, el CEO ha vuelto a subrayar la herencia de Bankia y la elevada penetración de la entidad absorbida en 2021 entre los usuarios de la Comunidad Valenciana. «Estamos muy satisfechos de la estabilidad en Cataluña», ha reiterado el directivo; pero sostiene que «estamos donde queremos estar». «No hay circunstancias que justifiquen nuestro regreso».

Un mercado «medianamente consolidado»

Sobre las consecuencias de la hipotética fusión entre BBVA y el Sabadell, en caso de que la OPA hostil llegue a buen término, Gortázar ha descartado nuevas fusiones que impliquen a CaixaBank, si bien «el resto de entidades deben ver qué necesitan». La estructura bancaria española, contraria a la lectura que hace el tejido empresarial -especialmente el de pequeñas y medianas empresas- el CEO describe una industria «con un nivel de concentración medio». Por tanto, «hay espacio para nuevas fusiones, pero que sea necesario es decisión de cada entidad».

Por otro lado, el directivo ha rechazado hacer comentarios sobre los recientes movimientos empresariales de la Moncloa -entre los que destaca la oposición a la misma OPA o el cambio de presidencia de Telefónica-. Sin embargo, ha aprovechado las preguntas de los periodistas para alabar la «excelente gestión» del presidente saliente de la TelCo, José Maria Álvarez Pallete, durante su estancia al frente. Con todo, ha negado la posibilidad de que el ejecutivo de Pedro Sánchez pueda hacer un movimiento similar en CaixaBank, dado que «la situación, tanto de estructura accionarial como de perspectivas, es muy diferente». La participación del FROB en el capital de la entidad, dice, se ha revalorizado a un factor 4,5x respecto a cuando accedió, lo que garantiza una «unión pacífica» con el capital público.

Nou comentari

Comparteix

Icona de pantalla completa