Apple ha preferido evitar la sanción multimillonaria -un 10% de su facturación anual- con que la amenazó la Comisión Europea y se ha comprometido a resolver los problemas de competencia en el sector de pagos a través de smartphones. El ejecutivo abrió una investigación contra la compañía por «distorsiones» en el mercado, pero finalmente ha aceptado las soluciones presentadas por Apple y no la sancionará. Entre las medidas que se aplicarán, hay la de facilitar el acceso a terceros a su sistema operativo -iOS- de forma gratuita durante los próximos años para que los competidores puedan ofrecer sistemas de pago alternativos al Apple Pay para los usuarios de Iphone.
La investigación de la Comisión Europea duró dos años y concluyó, el mayo del 2022, que las prácticas de Apple en este sector impedían la entrada de nuevos competidores y desincentivaban la «innovación». Los usuarios, decían las conclusiones del ejecutivo, se veían abocados a utilizar únicamente Apple Pay porque no tenían alternativas.
Según la Comisión Europea, Apple era la única empresa que tenía un acceso total en la tecnología estándar que se usa en pagos sin contacto -NFC- dentro del sistema operativo iOS. Esto provocaba que Apple disfrutara de un poder de mercado «significativo» en la venta de dispositivos móviles. La Comisión pidió a Apple una rectificación y la multinacional ha presentado un conjunto de propuestas que han sido aceptadas.

Apple hace contenta la Comisión Europea para evitar una multa billonaria
Este 2024, después de dos años estudiando las soluciones en las quejas de la Comisión, Apple ha presentado una serie de compromisos para evitar la multa del 10% de la facturación anual que quería aplicarle el ejecutivo europeo. La Comisión ha aceptado que Apple permita el acceso de forma gratuita a competidores externos al servicio operativo iOS porque estos ofrezcan servicios de pago alternativos, que se permita a los usuarios de iPhone que lo deseen configurar «de forma sencilla» otra aplicación de pago alternativa a Apple Pay y que se autorice a terceros a acceder a funcionalidades adicionales, como por ejemplo mecanismos de autenticación. La aplicación correcta de estas prácticas será evaluada de forma «independiente».