El empresario Josep Santacreu ya es oficialmente presidente de la Cambra de Comerç de Barcelona. Este lunes por la mañana el nuevo pleno de la corporación Barcelonesa ha elegido la exCEO de DKV como nuevo máximo representante de la Cambra para los próximos cuatro años en los cuales se ha comprometido a trabajar y “edificar” sobre los cimientos que Herramientas han construido los últimos cuatro años. Para esta tarea, el empresario estará acompañado por el presidente ejecutivo de Fluidra, Eloi Planes, la directora de Font Packaging, Martina Font, y el presidente de Moventia, Miquel Martí, como vicepresidentes, los tres miembros del pleno como representantes de las patronales catalanas. También acompañará a Santacreu al comité ejecutivo de la Cambra el director general adjunto del Banco Sabadell, Xavier Comerma, como tesorero. Los vocales para estos próximos años serán Emma Gumbert, Xavier Pujol, Marta Angerri, Enric Bordas, Salvador Vendrell, Augusto Tarragó y Joan Nogués.
Durante su discurso, Santacreu ha querido agradecer a la presidenta saliente, Mònica Roca, a todo el equipo de gobierno y al pleno todo el que han hecho en el último mandato y los ha reconocido “el trabajo bien hecho”. En esta línea también ha expresado su voluntad “para sumar esfuerzos” dentro del nuevo pleno de la corporación, destacando que dentro de su candidatura, Va d’Empresa, hay “muchos perfiles diferentes” que defienden el global de la actividad empresarial de Cataluña. Continuando con la línea de la campaña electoral, Santacreu ha comentado que quieren trabajar “sin hacer ruido” por todo el empresarial del país y empoderarlo para que Cataluña sea un país todavía más competitivo.
Además, antes de ser proclamado presidente, Santacreu, ha establecido los principales esos de su mandato al frente de la Cambra para los próximos cuatro años, que en gran parte coinciden con los que ha marcado Eines de País los últimos años. Estos son la busca de reducir la burocracia a las administraciones para hacerlas más ágiles; contribuir a la mejora de la sociedad; fomentar la sostenibilidad; impulsar la cultura empresarial; luchar para que la economía catalana impulse la transformación, la innovación y la investigación. Además, el empresario también buscará impulsar la internacionalización de las empresas catalanas, luchará por el pleno empleo, defenderá un nuevo modelo de financiación para Cataluña y reducir “los agravios fiscales” que sufre el país, así como la carencia de inversiones en infraestructuras y el impulso para una industria moderna por el país.
Para salir adelante sus planes al frente de la Cambra, Santacreu ha asegurado que se guiará por cuatro objetivos vertebradores comunes. Estos son la representatividad, trabajando con todos los sectores de actividad con el fin de valorar todos los agentes implicados, la influencia, para convertirse en un interlocutor creíble y privilegiado ante todos los actores, la efectividad, buscando una gestión más orientada en la operatividad que reduzca al máximo la burocracia administrativa. Finalmente, el empresario también ha hecho valer la independencia de la Cambra, un organismo que tiene que tener, ha asegurado, su punto de vista, con una voz propia y no influenciada por ninguna institución externa.
Eines alarga la mano a la nueva presidencia
Por parte de Eines de País, ha intervenido el pleno el hasta ahora vicepresidente primero de la Cambra, Antoni Fitó, que ha alargado la mano a Santacreu para trabajar plegados los próximos años. En este sentido, Fitó ha recordado que las dos candidaturas defienden “un objetivo compartido” y quieren “compartir la responsabilidad” de dirigir la Cambra. Esta voluntad nace, ha explicado Fitó, de la coincidencia de los ejes de Va d’Empresa presentados por Santacreu con los de Herramientas de País. En esta línea, el miembro del pleno se ha mostrado convencido que ambas candidaturas podrán “compartir la responsabilidad y trabajar plegados”. A la vez, Fitó también ha recordado que si la Cambra tiene que ser de todos los empresarios de Barcelona, más allá de las candidaturas, le costaría mucho de entender que una candidatura que ha obtenido más de un tercio de las vocalías no tenga presencia al comité ejecutivo de la corporación.