El Círculo de Economía entrega su premio a la construcción europea a Uğur Şahin y Özlem Türeci, cofundadores de BioNtech. Los científicos lideraron la creación de la primera vacuna específica contra la Covid-19 durante la pandemia. El vaccí creado por los dos expertos alemanes fue posteriormente distribuido por Pfizer, y ocupó buena parte del mix de la oferta sanitaria de los varios estados europeos en su ofensiva contra la expansión del virus. El presidente del club de la burguesía catalana, el que fuera consejero delegado del Banco Sabadell Jaume Guardiola, ha querido destacar «el enorme impacto en el bienestar de los europeos» que logró la empresa con su descubrimiento. Los adelantos conseguidos por Şahin y Türeci, apunta el presidente, aportaron una «incidencia inmediata en la vida de los ciudadanos europeos» en medio de la crisis sanitaria.
Los dos recipientes del galardón han destacado la vinculación de los valores europeos con el núcleo central creativo de la ciencia básica, «una cuestión no solo técnica, sino profundamente ética», en palabras de Şahin. Los cofundadores de BioNTech se han mostrado «profundamente honorados» por el reconocimiento; uno que leen como evidencia que «el propósito más noble de la ciencia es servir la humanidad». Europa, celebran, conserva un «espíritu de pluralidad, integración y diálogo» que encaja con los objetivos centrales de la ciencia básica. En este sentido, agradecen la participación de los varios órganos europeos en las iniciativas de investigación. Ellos mismos, recuerda Türeci, han estado recipientes de financiación europea a la innovación para impulsar sus tratamientos. BioNTech, hay que recordar, empezó como una empresa dedicada al desarrollo de vacunas individualizadas contra el cáncer; pero saltó en busca del vaccí contra la Covid en medio de la crisis sanitaria.
Sentido de cooperación
Así, ambos fundadores destacan la ensambladura del espíritu de cooperación europeo con los objetivos de la ciencia básica. Şahin, pues, ha hecho un llamamiento a la solidaridad como herramienta de garantía del bienestar propio. «En un mundo tan interconectado, mejorar la vida de nuestros vecinos mejorará las nuestras», declara el científico. Los cofundadores, pues, celebran el foco en los adelantos en ciencias sanitarias que toma la Unión Europea. El «momento clave» donde se encuentra el continente así lo pide. Türeci, pues, grita empresas e instituciones a encontrar espacios de colaboración. El trabajo conjunto entre sector público y privado está «imbricado con Europa», concluye.





