Patronales y entidades profesionales de la economía niegan el optimismo de gobierno y sindicatos con las datos de paro publicadas este jueves por el ministerio de Trabajo y Economía Social. La patronal de la pequeña y mediana empresa Pimec alerta que la bajada de la desocupación en mayo –un mes históricamente positivo para el mercado laboral– es «la peor de los últimos 10 años».
Según el secretario general de la entidad, Josep Ginesta, otros cursos se habían registrado contracciones del paro de a el cercando de 10.000 personas en Cataluña, mientras que este año solo se ha reducido en menos de 2.700 parados. El representante empresarial niega, además, efectos de base: si bien es cierto que los primeros meses del año habían estado mejores que otros ejercicios –y, por lo tanto, había menos paro a reducir– la tasa continuaba en los dos dígitos. «No aceptamos que se instale el mantra que es bueno mantener un paro estructural alrededor del 10%«, espeta.
«El objetivo tendría que ser equipararnos en términos de paro registrado y estadístico a nuestros competidores», ha reclamado Retama. Tanto Cataluña como el Estado están lejos de este objetivo: ambos mercados se mantienen por encima del 10% en desocupación –un 10,4% en el país al acabar el primer trimestre, un 12,5% en España–; mientras que la Unión Europea celebraba a finales de mayo un 6%, y la Eurozona un 6,5%.

Cataluña mejora menos
Por su parte, el Colegio de Economistas de Cataluña apunta que, todo y el carácter positivo de los datos de ocupación en términos absolutos, el paro «se reduce en Cataluña a menor ritmo que al conjunto del estado». El mercado laboral catalán, de hecho, es lo tercero peor en cuanto a descenso mensual de las personas paradas, y el cuarto por la cola si se pone el foco en la comparativa interanual. En este sentido, el decano del CEC Carles Puig de Travy asegura que la situación «tendría que ser objeto de reflexión por parte de autoridades y de la sociedad en conjunto»
La CEOE avisa que «se ha tocado techo»
Los empresarios españoles, a su vez, apuntan que la reducción de la desocupación podría haber «tocado techo» en el estado. Según la CEOE, el moderado crecimiento en nuevos contratos y nueva afiliación podría indicar que se ha llegado al límite de la capacidad de creación de lugares de trabajo del mercado laboral español. En caso de confirmarse este análisis, la situación sería «muy preocupante», en cuanto que España mantiene un paro estructural superior a los 2,7 millones de personas. «No podemos ignorar que una patología alarmante del mercado laboral español es la persistencia de altas cifras de paro, con un marcado carácter estructural, todo y los elevados volúmenes de afiliación», reitera la patronal.