CCOO y UGT anunciaron este miércoles que convocaban una huelga en Iberia durante las próximas vacaciones de Navidad. Concretamente, la aerolínea española se verá afectada los días 29, 30 y 31 de diciembre y 1, 4, 5, 6 y 7 de enero por esta huelga, puesto que la compañía se ha negado a crear un autohandling a los aeropuertos donde ha perdido la licencia. En el comunicado donde se anuncia la parada, los sindicatos informan de después de haber celebrado diferentes reuniones con Iberia y IAG, la empresa no ha aceptado crear la autohandling que dé servicio en las aerolíneas del grupo. Así, han decidido convocar esta huelga para la temporada de Navidad.
El conflicto nació cuando Aena sacó a concurso la asistencia a tierra de las aeronaves e Iberia no consiguió imponer su oferta a ocho aeropuertos, en una decisión que no descarta recorrer ante los tribunales. Mientras tanto, y ante las inquietudes que ha creado la situación, la plantilla pidió a la dirección que hiciera ella misma el servicio para los aviones de IAG en estos aeropuertos, prescindiendo de las empresas ganadoras del concurso. Todo y las demandas, Iberia considera esta opción del todo «inviable».
Por otro lado, Iberia, a través de otro comunicado, mostró «su enorme decepción» ante esta «irresponsable convocatoria» de huelga, puesto que asegura haber estado en contacto continuamente con los agentes sociales desde que se resolvió el concurso de handling de Aena, el pasado 26 de septiembre, para «satisfacer las principales inquietudes de sus trabajadores». A la vez, Iberia considera que una huelga en estas fechas «daña irreparablemente el derecho a las vacaciones y a la reunificación de familias y amigos» de manera «irresponsable».
Esta huelga llega porque los trabajadores de Iberia que tenían como centro de trabajo uno de los aeropuertos donde la empresa ha perdido la licencia, según el convenio colectivo, pasarán a ser subrogados a la nueva empresa adjudicataria del concurso de Aena y tendrán como garantías el mantenimiento del salario, de la jornada actual y días de vacaciones, antigüedad, mismo contrato, revisión salarial, de los derechos adquiridos en el uso de billetes de avión y de los planes de pensiones. Es por eso que, según Iberia, «la nueva situación provocada por la resolución de los concursos de handling de Aena no pone en riesgo ni un solo puesto de trabajo de ningún trabajador de Iberia».
El autohandling no es viable
Todo y las peticiones de los trabajadores, Iberia ha asegurado a los sindicatos que el autohandling y la subrogación parcial no es una solución viable porque se quedarían al grupo las personas de mayor edad y, por lo tanto, con mayor salario. Esto significa que los operadores adjudicatarios del concurso contarían con el personal de menor coste salarial, por lo cual podrían ofrecer unos precios mucho más competitivos que los que se pueden conseguir mediante el autohandling, creando una brecha de competitividad.
Además, esta diferencia de competitividad, Iberia asegura que también le impediría cumplir con el nivel de rentabilidad que el grupo tiene comprometido con sus accionistas. En este sentido, consideran que si pasaran a hacer autohandling la compañía estaría premiando económicamente a los ganadores del concurso de Aena y a las aerolíneas internacionales con quienes compite, lo cual se traduciría en «peores resultados, incapacitado de crecimiento y una amenaza al conjunto de sus trabajadores».